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Espoleados por haber conseguido entrar en el Congreso, UPyD-Ceuta
anunció ayer que pedirá tener “voz y voto” en la Comisión de
Redacción del Estatuto de Autonomía cuando esta vuelva a
convocarse e hizo un negro balance en lo que a la salud
democrática de la ciudad se refiere de las pasadas
elecciones generales.
Su coordinador territorial, Julián Domínguez, atacó a todo y
a todos: a los medios públicos, por contribuir a instaurar
el bipartidismo reduciendo la presencia de formaciones
minoritarias como la suya “a diez ridículos minutos”; a las
instituciones, por dejar a determinadas barriadas como los
dos Príncipes o Benzú “sin un solo panel donde colocar
publicidad electoral”; al PP y al PSOE, por volver nada más
pasar los comicios a su política de promoción “del odio, la
mentira y el cinismo de decir cosas que se van a hacer y
nunca se hacen, como bien saben los vecinos de Benzú,
aislados desde hace tiempo como si fueran el tercer mundo
dentro de una ciudad que en muchas de sus partes parece del
tercer mundo”.
En ese momento, y aprovechando que pasaba por la periferia,
Domínguez tildó de “deleznable” el que, siempre según su
versión, en “algunas mezquitas” de la periferia se pidiese
explícitamente el voto para un partido. “No es ético”,
censuró el líder de UPyD en Ceuta, que se negó a dar el
nombre tanto de la mezquita como del partido al que se quiso
favorecer, aunque dio pistas suficientes para intuir que
aludía a la de Sidi Embarek y alrededores y al PSOE.
Eso sí, equitativo, cuando al final de la rueda de prensa
supo que en alguna iglesia local el domingo se instó a no
votar a los partidos que negocian con ETA [o sea al PSOE],
aseguró que de haberlo sabido antes hubiera dicho lo mismo
de este hecho ante los micrófonos.
Domínguez criticó también con dureza que cargos de la
Administración General del Estado ejerciesen el domingo como
interventores o apoderados del PSOE y el lunes relajasen sus
obligaciones laborales y cargó contra la “corruptela
generalizada” que según su parecer se encuentra tanto en la
Ciudad como en el Estado.
Para ponerle coto UPyD propondrá limitar a dos el número
máximo de mandatos que puede encadenar un presidente y que
se pueda elegir directamente al líder del Ejecutivo
autonómico, algo que para lo que habría que modificar la Ley
Orgánica de Régimen Electoral General (LOREG), iniciativa
que UPyD defiende también como una forma de evitar que el
‘voto nacionalista’ valga hasta seis veces más que el que va
a IU o a UPyD.
De momento, UPyD Ceuta, que ya roza el medio centenar de
militantes y ayer agradeció a todos los que colaboraron con
ellos durante la campaña su apoyo, celebrará dl próximo día
24 una Asamblea en la que su Coordinadora pondrá a
disposición de sus bases sus cargos.
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unión, progreso y democracia
