Pinocchio es una obra “muy cuidada y muy completa”, señaló
Rubén Olmo en la rueda de prensa que ofreció junto al
productor Oriol Subirana, “porque nosotros trabajamos así”.
“Hoy en día se suele echar más morro que talento”, manifestó
Olmo, para quien los bailarines del programa de televisión
Fama son “tecnicamente más callejeros”.
Asimismo, el bailarín destacó la importancia que ha tenido
Antonio Canales en la danza contemporánea, pero lamento que
“al final de su carrera se le ha ido el camino”, algo que
también dijo le ha ocurridoa Rafael Amargo.
Olmo explicó que la adaptación de Pinocho fue un encargo que
decidió apropiarse para montarlo en gran formato con su
propia Compañía, la cual “está muy considerada dentro de la
profesión”.
El artista sevillano indicó que escogió al muñeco de madera
porque “quería contar con libertad de expresión” y advirtió
al público que no se trata de una obra infantil.
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