La semana pasada, dentro de las medidas habituales de
control de perros vagabundos, los servicios de recogida de
animales y veterinarios de la Ciudad recogieron por el
centro de Ceuta un can con síntomas compatibles, entre otras
enfermedades, con la rabia. Una vez capturado por el
servicio de laceros de la Ciudad, el perro fue llevado a la
perrera donde estuvo en observación hasta que murió el
pasado viernes 7 de marzo. Ante las sospechas de que
estuviera infectado por la mortal enfermedad, los
veterinarios enviaron el encéfalo del animal al laboratorio
de referencia en el análisis de la rabia, Instituto Carlos
III de Majadahonda (Madrid), para confirmar o rebatir esta
hipótesis y el pasado miércoles se certificó el resultado
positivo del análisis.
Medidas y recomendaciones
Como la rabia es una enfermedad mortal, que se puede
transmir por el contacto de la saliva del ser enfermo con
cualquier cuerpo a través de un mordisco, un arañazo o una
herida, la Consejería de Sanidad de la Ciudad advierte a
todo aquel que haya tenido contacto con un animal
desconocido, debe acudir urgentemente al servicio de vacunas
situado en el número 4 de la calle Álvarez o a los servicios
de urgencia de INGESA.
Además, la Ciudad ha publicado otras medidas que deben ser
adoptadas por el foco de rabia detectado en Ceuta. Las
personas que tengan mascotas deben llevarla siempre con
correa y comprobar que estas se encuentran identificados con
microchip y con la documentación sanitaria que certifique la
identificación, censo y vacunación de la rabia actualiazada.
La última vacunación no debe sobrepasar un año de
antigüedad.
Sanidad considerará a todo aquel animal que se encuentre
suelto por la calle, sin la compañía de su dueño, o sin
microchip, tatuaje o documentación sanitaria, como
abandonado, y aplicará con ellos las medidas establecidas en
la legislación vigente. Los animales declarados abandonados
pueden considerarse incluso riesgo para la salud pública.
Otra de las medidas que ha tomado la Ciudad ha sido la
suspensión de forma temporal, y “con un período mínimo de
tres meses desde la aparición del último animal positivo
frente rabia” (si no aparecen más desde la semana pasada),
de la celebración de concursos, certámenes o cualquier otro
que suponga la suelta (aunque se efectúe de manera
individualizada) y/o concentración de animales de las
especies susceptibles a la enfermedad.
Sanidad también ha anunciado la prohibición de suelta de
animales susceptibles, de forma individual por parte de sus
propietarios, en la zona de campo exterior, si el animal no
se encuentra debidamente identificado, con la vacunación
antirrábica actualizada y con un certificado desde el
Servicio de Sanidad Animal y/o pasaporte para animales de
compañía que demuestre que la titulación de anticuerpos
frente a rabia resuelta es suficiente.
Javier Carrillo, responsable de Vacunas de la Ciudad, ha
destacado que “la buena” noticia es que se ha detectado el
problema y que hay vacunas cien por cien eficaces para no
lamentar ninguna fatalidad”. Durante el día de ayer nadie en
la ciudad solicitó ser vacunado por este caso.
|