Se nos presentaba la incógnita del
“día después”, para lo que ha tenido que pasar una
legislatura de cuatro años, durante los que ha venido
rigiendo el Partido Socialista Obrero Español los destinos
de la nación, la campaña electoral y, por último, el
resultado de los comicios. Y decimos la incógnita porque,
quiérase o no, la derrota en las urnas del Partido Popular
ha hecho pensar a muchos politicólogos que se produciría la
retirada de Mariano Rajoy de la política activa.
Posteriormente hemos visto, tras la reunión del Comité
Ejecutivo Nacional del Partido, como Mariano Rajoy ha
decidido “tomarse su propio tiempo para preparar el terreno
para ganar las próximas elecciones”, todo ello apoyado
unánimemente por los miembros de dicho Comité, porque “ha
mejorado los resultados, es lo mejor para el Partido y para
España y porque tiene mas de diez millones de españoles que
le han apoyado. Esto es lo que hay”, según él mismo ha
manifestado. Antes de ello presenciamos su aparición pública
tras conocerse los resultados y nos quedamos en el recuerdo
con el abrazo sincero y a la vez cariñoso con que su esposa
Elvira -que ha guardado siempre su independencia y reserva
en comparecencias públicas- conocedora de su entrega le
dedicaba en compensación al revés sufrido y que pudimos
presenciar todos los españoles a través de la pantalla de
TV.
Con referencia al nuevo equipo, nosotros nos inclinaríamos,
entre otras muchas y valiosas personas con que cuenta la
entidad, porque Rodrigo Rato Figueredo -quien tiene
demostradas cualidades para desempeñar un importante cargo
dentro de la directiva del Partido- se incluyera en el que
se formará a partir del Congreso a celebrar en junio próximo
quien, quizás por ser gran conocedor de la idiosincrasia de
los españoles y sus amplios conocimientos en Economía,
coadyuvaría para lograr el éxito en las próximas elecciones
aunque, como Mariano Rajoy, no necesita de la política para
subsistir, al contrario, dispone de una excelente y bien
retribuida posición laboral (asesor de la Banca de inversión
Lazard, miembro del Consejo Asesor del Banco de Santander y
en expectativas de encabezar el Consejo Asesor de Critería
CaixaCorp -grupo inversor que aglutina una importante
cartera industrial con un beneficio neto individual de 2.3l6
millones de euros en el último ejercicio-). Habría que saber
por tanto si Rodrigo Rato está dispuesto a asumir la
responsabilidad de su próxima candidatura a ministro del
hipotético gobierno que formara Rajoy, para lo que necesita
personas con total dedicación y entrega desinteresada.
De toda maneras hay que agradecer a Rajoy la voluntad y
constancia puestas al servicio de unas ideas que estima son
las mejores para regir los destinos de un país al que se le
presenta un oscuro panorama político y económico: por un
lado, la recesión económica en general que no tiende, como
se dice, a ser pasajera y que ya se viene notando en el
aumento del paro, el excesivo incremento de los precios de
productos básicos, la bajada de ventas de viviendas y de
automóviles, estas dos últimas situaciones indicativas de
las pocas disponibilidades económicas con que cuenta la
ciudadanía y lo que supone para la absorción de mano de obra
y, en definitiva, del desarrollo económico de un país, a lo
que alguien tiene que poner trabas y nadie mejor, llegado el
caso, que el Partido Popular. Por otro, en la cuestión
política, creemos que “en el pecado se lleva la penitencia”
y los acuerdos con vascos y catalanes a mas de las
conversaciones con ETA, de llevarse a cabo en la forma que
exigen estas agrupaciones, darían opción a gobernar al PP
por el rechazo que ello produciría del resto de la
ciudadanía.
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