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Hasta la fecha existían
bonificaciones para pensionistas, mayores de 65 años,
trabajadores que no superaran unos ingresos determinados.
Pero la Ciudad Autónoma dando un paso al frente
absolutamente decidido, aunmenta las bonificaciones hasta la
gratuidad para los estudiantes universitarios menores de 24
años.
Es el cuarto colectivo que se beneficia, en este aspecto, de
la política autonómica local. Los universitarios podrán
hacer uso hasta cuatro veces del autobus a coste cero
retirando para ello unos boletos que se entregará en las
oficinas del Palacio Autonómico. Se trata de una medida
digna de elogio y de la que todos ven con buenos ojos.
Teniendo en cuenta que los centros universitarios ceutíes no
se encuentran precisamente en el centro, el colectivo de
universitarios de Ceuta está, sin duda, de enhorabuena.
Estas medidas directas hacia la población juvenil estaba en
la mano de todos los gobiernos que ha ido pasando en
diferentes épocas por la presidencia del gobierno ceutí, sin
embargo ha sido ahora con el Partido Popular al frente del
Ejecutivo ceutí cuando ha salido a la palestra una de las
múltiples formas de incentivar al joven universitario. La
preparación de nuestros jóvenes y, sobre todo, que no se nos
terminen yendo a la península debe ser otro objetivo.
Primero porque también nos quedemos con los buenos y seundo
para evitar el desarraigo cada vez más evidente en una
ciudad que ha perdido a 10.000 ceutíes naturales en la
última década, sencillamente porque se han dado cuenta -como
dijo el delegado del Gobierno- de que hay “más vida al otro
lado del Estrecho”. Aunque evidentemente esa afirmación es
cierta aunque no apropiada, mientras se afirma eso aquí,
otros afirman que la mejor vida se vive en Ceuta, situación
que obliga al Estado a subvencionar esa buena vida ceutí a
la que otros intentan llegar aunque no conozcan el idioma.
Como no son apropiados determinados consejos, siempre es
bueno que se tomen medidas para nuestros universitarios que
se lo merecen y mucho.
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OPINIÓN / EDITORIAL
