Un año más, como cuarto consecutivo ya, los más pequeños se
desarrollan y aprenden jugando gracias a la Escuela
Multideportiva que la Ciudad pone a disposición a través del
Instituto Ceutí de Deportes. En esta ocasión más de veinte
niños acuden al pabellón Antonio Campoamor para participar
en esta actividad deportiva cuyo objetivo se basa en el
desarrollo psicomotor y el aprendizaje de las habilidades
motrices básicas de los más pequeños.
Los balones y las cuerdas son algunos de los muchos
utensilios que cada martes y jueves Ana Mur, coordinadora de
esta actividad, utiliza con los más pequeños para ayudarles
a que estos tengan un desarrollo motriz adecuado, y puedan
pasar favorablemente al siguiente peldaño en la escala de
las escuelas deportivas del ICD, que es la Escuela de Balón.
La también coordinadora de las actividades acuáticas en el
polideportivo Díaz-Flor reconoce que esta actividad se ha
convertido año tras año en un rotundo éxito, ya que existen
muy pocos deportes que puedan practicar adecuadamente niños
tan pequeños, sirviendo esta escuela, además, como trampolín
a estos.
“Hemos conseguido que después de cuatro años esta actividad
sea todo un éxito. La clave está en que a parte de la
natación no existen casi deportes que puedan practicar los
niños tan pequeños adecuadamente, y nosotros les ayudamos a
desarrollarse y a que aprendan esas habilidades que les
serán últiles para practicarlos”, declaró Ana Mur.
No en vano, el cupo de veinte plazas quedó cerrado a
principio de temporada nada más abrirse, síntoma del acierto
del ICD para poner esta actividad a disposición de los más
pequeños.
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