El Ceuti dio ayer un paso atrás definitivo en su intento de
acabar entre los dos primeros y pelear por el ascenso. Los
blanquinegros perdieron en Moguer ante el Pedro Alonso Niño
por 32 goles a 27 en partido aplazado de la 18ª jornada de
Liga.
Los de ‘Ali’, que viajaron el mismo día y llegaron al
polideportivo municipal de Moguer con 25’ de retraso (el
partido había sido fijado a las 13 horas), no tuvieron
tiempo prácticamente ni para calentar. “Nos han dicho que el
partido empezaba a las dos menos cuarto y los jugadores sólo
han calentado unos minutillos, después de cambiarse”,
explica el técnico de la U.A. Ceutí. El equipo unionista
jugó un mal primer tiempo en el que encajó 18 goles, cuando
la defensa es su mejor ‘arma’ esta temporada. “Nos ha
costado mucho meternos en el partido y el nivel defensivo en
la primera parte no ha sido bueno; al final de la primera
parte hemos mejorado, pero nos hemos ido cinco goles abajo
al descanso, una desventaja considerable teniendo en cuenta
que Moguer es un buen equipo y está enrachado”.
Los caballas estuvieron mucho más entonados en la segunda
parte, que terminó con empate a 14 goles. Ali explica que
“Moguer se ha dedicado a administrar la ventaja con ataques
pausados. Hemos llegado a ponernos a dos goles, pero
perdimos en ataque muchos balones como en Málaga y ha sido
imposible puntuar. Nos ha vuelto a faltar fluidez en ataque
porque las pérdidas de balón han sido numerosas, aunque
Moguer también defiende bien”.
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El acta recoge gritos racistas y xenófobos
Los colegiados andaluces Molina
Baena reflejaron en el acta que se escucharon gritos de
carácter racista y xenófobos en la segunda parte, cuando los
ceutíes pidieron un tiempo muerto. La pareja arbitral
escribió que “se escucharon gritos racistas desde la grada
dirigidos al equipo contrario ‘moros de mierda e hijos de
puta’”.
Ali asegura que el P.A.N. se impuso al Ceutí en buena lid y
el partido se desarrolló con normalidad. “Los árbitros eran
los de Badajoz, han cometido algunos errores, pero hemos
fallado nosotros”.
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