No han tardado en reaccionar los representantes sindicales
de la prisión de Los Rosales tras el anuncio de los
“trabajos previos a las obras del nuevo centro
penitenciario” realizado por la Delegación. UGT cree que
sólo se trata de una medida de “propaganda política con
dinero público” y advierte de que antes de los “fuegos de
artificio” existen problemas del día a día que continúan sin
que se tomen medidas para su solución como la estancia de
300 internos donde sólo caben 180
Indignación y contrariedad. Esas son las sensaciones que ha
causado el anuncio de la Delegación del Gobierno respecto de
los trabajos previos para el nuevo hospital. “El sindicato
UGT Prisiones no tiene constancia ni de que se hayan
realizado estudios sobre la ubicación de la nueva prisión,
ni de que el Ministerio del Interior haya llegado a algún
tipo de acuerdo con el Ministerio de Defensa”, ha afirmado
Raúl Fernández, secretario de Acción Sindical de Prisiones
de UGT. “La última noticia fehaciente que se nos trasladó
fue el acuerdo del Consejo de Ministros para el presupuesto
de la construcción, pero nada más”, dijo el sindicalista.
“Nos parece inadmisible que la siguiente noticia que hemos
tenido haya sido a través de una nota de prensa de la
Delegación del Gobierno, en plena Campaña Electoral”,aseveró
antes de asegurar en declaraciones a EL PUEBLO que “es
indigno que se utilice el dinero público como método de
propaganda política”. De ser cierta la noticia, dijo
Fernández “la ubicación prevista sería totalmente inadecuada
porque la Ley prevé que los centros penitenciarios de nueva
construcción estén fuera de los núcleos urbanos y además
porque la prisión quedaría a un nivel inferior de cota que
una barriada populosa de más de 8.000 personas, poniendo en
peligro la seguridad del centro”, señaló.
Problemas del día a día
“Desde UGT prisiones pedimos más seriedad y que, en lugar de
difundir noticias sin base alguna, se trabaje en solucionar
los problemas que actualmente tiene la prisión, como por
ejemplo: seguimos con el muro sin reparar desde hace cuatro
años, llevamos siete meses sin psicólogos y la prisión
actualmente está masificada con casi 300 internos para una
capacidad de 180 con la conflictividad que esto supone”
enumeró el responsable de acción sindical de Prisiones de
UGT, Raúl Fernández
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