La Guardia Civil en su sitio
 

Jesús Carretero
jesuscarretero@elpueblodeceuta.com
 

Ni es la primera vez, ni será la última, que la Guardia Civil, unos profesionales de los pies a la cabeza, esté en su sitio. Y digo, estar en su sitio, cuando gracias a su trabajo, su saber el terreno que pisan y su profesionalidad, han dado con uno de esos “presuntos nidos” en los que se movía con cierta intensidad la droga.

Y en esta ocasión, hace muy pocos días, la Guardia Civil desarticuló una “supuesta” red de menudeo de droga que operaba en Benzú.

Desde hace un mes, o algo más, ir a Benzú no es lo más cómodo, desde el centro de Ceuta, pero pocas dificultades parece que tienen y tenían quienes desde el otro lado de la frontera pasaban, contra viento y marea, para ir almacenando “su mercancía”.

Esto no ha sido casual, ni mucho menos, debido a las malas condiciones del mar por el levante. Esto se venía buscando dentro de una de tantas operaciones, esta era la operación “Pétalos”, que estaba controlando y vigilando con todo tipo de garantías los lugares de venta o de transferencia de sustancias perjudiciales para la salud, estupefacientes, en esa zona.

Benzú puede ser un lugar estratégico para esos asuntos, y más ahora, cuando se encuentra casi bloqueado por la carretera principal, desde Ceuta, mientras que es muy fácil, como en cualquier momento anterior, que se llegue desde el país vecino.

Por eso, llegar la droga hasta la barriada no era complicado, guardarla en cualquier local de allí, tampoco debía tener demasiados problemas, claro que el problema sería total cuando la Guardia Civil, que mira y ve, controla y vigila, se ha percatado de que algo anormal estaba sucediendo en un domicilio de esa barriada.

A partir de aquí sólo quedaba aguardar, esperar y dar el golpe definitivo en su justo momento, y ese golpe se dio el pasado día 14.

Según parece, la droga no se traía de un golpe y en grandes cantidades, más bien llegaba poco a poco, en cantidades pequeñas y cuando había suficiente, se podía ejercer, también, sin gran volumen la venta.

Para la Guardia Civil esto podía traer más problemas, porque coger a un individuo con poca cantidad, podría haberse tildado de un simple fracaso y esperar a que hubiera mucha más cantidad implicaba la posibilidad de que los “pájaros” volaran, antes de dar el golpe definitivo.

Tras la operación se calcula que diariamente se podía estar vendiendo una cantidad de unos 400 gramos o más, bien en la propia barriada o partiendo de allí en otros lugares de la ciudad, por encargo de los propios consumidores.

De momento ya han caído dos marroquíes, que han sido detenidos, pero es más que posible que haya otros varios, tanto de Marruecos como de la propia ciudad de Ceuta.

Y, por tanto, los primeros en caer ya están a buen recaudo y lo que estamos deseando es que si, en realidad, hay más componentes de la banda, vayan cayendo uno tras otro, con lo que se habría dado, una semana más, un golpe a ese tráfico que no parece tener fin, en ciertas zonas muy cercanas a las fronteras.

Para mí, lo bueno de todo esto es que el asunto esté en manos de la Guardia Civil, porque a corto o a medio plazo el resultado de toda la operación será, del mismo tipo que vienen siendo las operaciones en las que actúa este cuerpo. Felicidades.