Si en el mundo de los ciegos el tuerto es el rey, ayer el CD
Linares actuó de monarca y la AD Ceuta de súbdito, en un
partido gris por parte de ambos conjuntos en el que se
comprobó la escasa fluidez ofensiva de unos y otros a la
hora de luchar por los puntos. Unos puntos que los caballas
difícilmente van a sumar de tres en tres si no solucionan
las carencias en ataque que ayer volvieron a ser mayúsculas,
en un encuentro en que las acciones a balón parado fueron su
único arma. Y eso que Benigno Sánchez puso toda la pólvora
que tenía en su poder, jugando con un equipo similar al que
había doblegado al Baza siete días antes en el Alfonso
Murube. Pero Enzo, Tato, Javi Navarro y Álvaro se vieron
incapaces de crear peligro ante el marco de un Moso que
defendió la portería linarense a pesar de sus molestias.
El encuentro comenzó con el Linares mejor plantado sobre el
terreno de juego que desde el primer minuto quiso dejar
claro cual iba a ser el papel de cada uno. Así los locales,
a los dos minutos, ya disfrutaron de su primera ocasión al
sacarse Óscar Ventaja un disparo a la postre atajado por
Lledó. Una salida incisiva que parecía mantenerse con el
paso del tiempo, ya que los azulillos apenas daban tregua a
los caballas. Por su parte los ceutíes, que parecía que la
historia no iba con ellos, daban la sensación de ser un
juguete roto en manos de los locales.
De esa guisa el primer tanto no tardaría en llegar, pero
pudo haberlo hecho antes, si Óscar Martínez hubiera estado
acertado al rematar un balón colgado por Sierra. Una acción
que no terminaría en gol pero que fue crucial para la suerte
del encuentro al tenerse que retirar Juanfran lesionado,
obligando a la entrada de Santacruz. Pero en el suspiro que
tardó en entrar al campo el central cordobés, los ceutíes
jugaron con diez dejando un hueco en el centro de la zaga
que sería aprovechado por Óscar Martínez para plantarse ante
Lledó y de disparo cruzado adelantar a los suyos cuando
habían transcurrido diez minutos de partido.
El tanto encajado obligó a los visitantes a abrise, lo que
permitió a los locales estar más cómodos y, sin hacer nada
del otro mundo, poder ampliar su ventaja en una doble
ocasión nacida de las botas de Sierra quien, primero obligó
a Lledó a despejar de puños, para recoger Óscar Ventaja un
rechace que cedió a Óscar Martínez para, a bocajarro,
rematar flojo a las manos de Lledó con toda la portería para
él.
Cumplidos los veinte minutos el empuje local empezó a
decaer, y con ello el ritmo del encuentro que entró en una
fase de desidia en la que los ceutíes tan sólo probaron
fortuna por mediación del gaditano Javi Navarro, que se sacó
un disparo lejano que salió desviado por poco. Una única
ocasión para los blancos en un primer periodo en el que les
costó entrar.
Control sin finalización
En la segunda mitad Benigno Sánchez decidió dar más
mordiente a su equipo, pasando a jugar con Alberto como
único mediocentro, al sustituir a David Fas por Seidi. Una
actitud descarada por la que se dejaron muchos metros y que
ya en el primer minuto de la reanudación pudieron significar
la sentencia si Óscar Martínez hubiera sabido definir al
plantarse sólo ante Lledó tras un clamoroso error de
Santacruz.
Con el susto todavía en el cuerpo, los ceutíes siguieron con
el guión previsto haciéndose dueños de la parcela ancha,
pero adoleciendo de la profundidad de la que también
carecieron en el primer periodo. Así el primer acercamiento
sería por mediación del grancanario Alberto que probó
fortuna desde lejos.
Con la idea de devolver las tablas al marcador los
visitantes se fueron creciendo, para empezar a colgar
balones sobre el área rival a base de jugadas a balón
parado.
De un córner botado por David Fas llegaría la oportunidad
más clara del Ceuta de todo el partido, al rematar Sandro de
cabeza al larguero. Posteriormente, una falta desde la
frontal, fue botada por Santacruz directamente a las manos
de Moso que paró rodilla en tierra. La siguiente sería de
una falta lateral sacada por Álvaro que apunto estuvo Diamé
de despejar hacia su propia portería, saliendo
definitivamente a córner. Un saque de esquina con el que
llegaría la polémica, al no señalar el colegiado una pena
máxima a favor de los ceutíes que vieron mano en el interior
del área local. Pero ahí se acabó todo, porque en la recta
final, lejos de llegar el empate pudo llegar el segundo para
los azulillos, tras una buena jugada por banda derecha de
Óscar Martínez quien cedió a Pedro Díaz para que su remate
saliera fuera por poco.
Primera derrota de Benigno Sánchez como técnico de la AD
Ceuta, quien tendrá que trabajar concienzudamente el ataque
de los suyos si quiere disputar el play off de ascenso a
final de temporada.
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El Ceuta volvió a quedarse a ´cero´ en un choque con pocas
ocasiones
Después de haber roto ante el Baza
su racha negativa sin ver puerta, el marcador de la AD Ceuta
volvió a quedarse en blanco en el dia de ayer en la visita a
Linarejos, donde los ceutíes evidenciaron una preocupante
falta de pegada ante un rival directo en la lucha por jugar
a final de temporada el play off de ascenso. Y es que ayer,
a diferencia de jornadas precedentes, a los blancos les
costó mucho trabajo llegar con peligro a las inmediaciones
del área local, a pesar de que Benigno Sánchez fue ambicioso
en su apuesta.
Y es que en la primera mitad las incursiones se redujeron a
un disparo lejano de Javi Navarro, mientras que en la
segunda las acciones llegaron a balón parado. Por su parte
los jienenses fueron los que tuvieron mayor profundidad y,
si no llega a ser por su falta de acierto en los últimos
metros, el resultado podía haber sido más abultado para los
azulillos.
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