L a unión hace la fuerza, y más cuando se trata de pequeñas
minorías con grandes necesidades. En una sociedad que cada
vez avanza más y que no para de encontrar mejoras para la
vida diaria, a veces nos olvidamos de aquellos que necesitan
una especial ayuda para hacer que día a día sea más fácil.
Son las personas discapacitadas, quienes requieren de una
especial atención de los demás para que se sientan
integrados. Para lograr estos objetivos, existe el Comité
Español de Representantes de Personas con Minusvalía (CERM
I), una entidad a nivel nacional al que todas las
asociaciones de Ceuta decidieron acogerse hace unos años
para lograr unidas sus objetivos comunes.
En la ciudad, la presidenta del órgano es Mercedes Medina,
responsable de la Asociación para la Lucha Contra las
Enfermedades del Riñón (ALCER). Medina destaca que “al
principio eran muchas menos pero a medida que se han ido
creando han decidido formar parte de este gran proyecto”.
Para entrar, es imprescindible que se trate de una entidad
que trabaje con discapacitados. Actualmente, en la ciudad
hay diez asociaciones acogidas al CERMI, que trabajan con
discapacidades tan dispares como ceguera, Síndrome de Down,
pérdida auditiva o Alzheimer.
En su búsqueda de ayuda por parte de las administraciones,
el pasado miércoles estas diez entidades firmaban varios
convenios con la Consejería de Asuntos Sociales de la Ciudad
por un valor total de 1,8 millones de euros. Medina destaca
que “estamos muy agradecidos pero es cierto que en estos
casos todo el dinero que se destine es poco”. En cuanto a la
subvención de este año, gran parte se destinará para
personal, “pero no para contratar más, sino para que el
justo que tenemos pueda cobrar el plus autonómico aprobado
por el Asamblea en 2007 para el plazo de tres años”.
Barreras arquitectónicas
Medina reconoce que, a nivel de los discapacitados, son
muchas las necesidades que hay. Cada asociación lucha contra
una patología determinada pero saben que todas juntas
siempre pueden hacer mucho más. Por ello, las diez
asociaciones integrantes del CERMI se suelen reunir a menudo
con la consejera de Asuntos Sociales, Carolina Pérez, y el
presidente de la Ciudad, Juan Vivas, para exponerle los
problemas que hay. “Son muchos y más aquí en Ceuta, donde
sigue habiendo muchas barreras arquitectónicas y
sensoriales” explica la presidenta de la organización. Esto
se debe en gran medida a que las administraciones y oficinas
para la atención de ciudadano se ubican en edificios
antiguos, llenos de escaleras y pasillos que hacen difícil
su acceso a personas con algún tipo de discapacidad.
Además, Medina cuenta que estas barreras se extienden hasta
a la hora de coger un barco. “Si no tienes ninguna
discapacidad no te das cuenta, pero si vas en coche con tu
familia y eres tienes una discapacidad motórica,
difícilmente podrás subir a cubierta” cuenta. De las cuatro
compañías navieras que operan en Ceuta, sólo una de ellas
posee un barco que tenga ascensor, aunque Medina comenta que
los problemas empiezan en la misma Estación Marítima “donde
ya existen numerosas barerrar arquitectónicas”.
Otro tema es el de los semáforos para ciegos. “Algunos se
han puesto ahora en la ciudad sonoros pero la gente dice que
el pitido es molesto, cuando peor es para el compañero que
no pueda cruzar la calle”. En cuanto a las personas con una
discapacidad auditiva, Medina destaca que “si en un edificio
hay un incendio no existen sistemas de luces que lo
indiquen, sólo la alarma”.
Pero, a pesar de todo, la responsable del CERMI admite que
en estos últimos años se está avanzando mucho por la
eliminación de estas barreras. Prueba de ello es “la
colocación de semáforos o la construcción de edificios con
ascensores y rampas”. En su afán por que todos puedan llegar
a todos los sitios, el CERMI mantiene un representante en la
Comisión de Accesibilidad formada en la Asamblea, “que se
encarga de supervisar las nuevas construcciones”. Pero
todavía queda mucho por hacer y Medina lo ejemplifica
bromeando y diciendo que “cuando salen promociones de
viviendas para discapacitados siempre se quedan vacías y yo
creo que es porque no pueden subir a las oficinas de
EMVICESA a solicitarlas”. En este aspecto, en el CERMI
reclaman que “el cupo de viviendas para discapacitados no
sea sólo para motóricos, sino para todas las demás
deficiencias”.
Feria por la sensibilización
La presidenta del CERMI en Ceuta afirma que “yo espero que
poco a poco vaya todo el mundo concienciándose de nuestras
necesidades y desde cada asociación realizamos distintas
acciones para sensibilizar a la gente”.
En ese afán por hacer cosas y darse a conocer entre la
población, Procesa ha organizado una feria para el próximo
mes de marzo en el que cada asociación instalará un stand y
ofrecerá información sobre la labor que realiza con los
discapacitados. Para Medina, el objetivo de esta iniciativa
es “recordar, porque sensibilizados ya estamos todos un poco
porque siempre se conoce a alguien que sufre algún tipo de
discapacidad, pero de vez en cuando hace falta recordar como
se sienten estas personas y cómo deben ser tratadas”.
La feria se desarrollará entre los días 13, 14 y 15 de
marzo, algo que desde la asociación que preside Mercedes
Medina, ALCER, ven con mucha ilusión “porque podremos
celebrar en ella el Día Mundial del Riñón que es el 13”.
Pero, además de sensibilizar a los demás, Medina también
incide en que en muchos casos hay que hacer ver a la persona
discapacitada que puede hacer su vida como otro cualquiera.
Por ello, explica que en ALCER trabajan con enfermos que se
encuentran en un tratamiento de diálisis. Para muchos de
ellos, este hecho hace que se encierren en sus hogares y no
quieran salir “pero hay que hacer actividades en las que
vean que pueden salir a tomar café, a pasear, que no se les
va a caer el mundo encima” comenta la presidenta de la
asociación. Además, esta entidad será este año la
beneficiaria de la recaudación obtenida con motivo de la
Carrera de la Mujer, que se celebrará el próximo 2 de marzo.
Para finalizar, Medina admite que la principal satisfacción
de este trabajo es la personal, el “ver cómo la gente mejora
día a día”. Para ella, la responsabilidad de esto la tiene
en cierta medida la Ley de Dependencia, considerando que
“Ceuta en este tema creo que ha sido pionera porque hay
gente que ya viene percibiendo las ayudas desde hace
tiempo”. También es importante la ayuda de la administración
y, por ello, reconoce que “siempre que nos hace falta algo
sabemos que sólo tenemos que levantar un teléfono para tener
a la consejera ahí”.
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