El sábado amaneció amagando con
llover, silbando el viento entre las callejuelas y
levantando espuma en las olas de la playa. Allá, en las
montañas que cierran al sudeste el valle de Tetuán las
nubes, retozonas, volaban en manadas pegadas a los riscos
del Gorgues. Intentaba encender la pipa en el jardín de casa
leyendo la triste nota que Julián Domínguez, portavoz de
UPyD en Ceuta, me remitía con el súbito fallecimiento en la
madrugada del viernes del compañero Antonio Suárez,
secretario general del SAE (Sindicato de Auxiliares de
Enfermería) y candidato suplente al senado de nuestro
partido, el de Rosa Díez. ¡Qué voy a escribir…!. Lo único
que importa ahora es enviar con estas líneas a su apenada
familia un afectuoso y fortísimo abrazo. ¡Del misterioso
Infinito venimos y al Infinito misterioso volvemos!. El río
de la vida, en su constante fluir, nos va arrastrando a
todos en sus aguas hasta desembocar en el mar, “que es el
morir” como glosaba genialmente Jorge Manrique.
Ayer, algunos profesores marroquíes con los que salí a cenar
sacaron a relucir mis últimas columnas sobre la posible
nominación de Mohamed V (fallecido sorpresivamente en 1961,
durante una sencilla operación quirúrgica) como “Justo entre
las naciones”. Tras confirmarles el proceso (apoyado por el
mismo Shimón Peres, veterano estadista al que tuve el honor
de tratar en varias ocasiones) les comento que entre la
nómina de 22000 “justos” hasta la fecha (entre ellos Oscar
Schindler, famoso tras la película) se encuentran al menos
70 musulmanes, la mayoría de Turquía y los Balcanes, pero
con Mohamed V sería la primera vez que un líder árabe y
marroquí por más señas fuera merecedor de este honor, una
buena señal por lo demás para alentar el ineludible deshielo
entre el mundo árabe -tradicionalmente hostil- e Israel.
Concluyo aprisa pues debo subir hacia un conocido
restaurante tetuaní sito en el aparcamiento de “Bab Tout”,
donde el grupo de abogados tetuaníes recientemente absueltos
por la Justicia tras su demoledora “Carta a la Historia”
denunciando la corrupción será homenajeado. Entre ellos se
encuentra un viejo conocido, Haji, al que por cierto acabo
de felicitar (Haji es además líder de un comité que
reivindica la “marroquinidad” de Ceuta, pero ese es otro
asunto). Es posible que en el transcurso del encuentro salga
a relucir el reciente problema judicial por el que está
atravesando el semanario “Tamuda”, su director Nizar Machan
y uno de sus colaboradores, mi amigo Said Mehini, tras ser
denunciados ante la Policía Judicial por Azzuz Moham,
avispado responsable de una formación política actualmente
“fantasma” en el escenario marroquí, la UNFP (Unión Nacional
de Fuerzas Populares) y que había sido denunciado en las
páginas de “Tamuda” por haber vendido, a su bola, la sede
oficial del partido en Tetuán, algo que el susodicho niega
pero que el rastro de los hechos, al parecer, confirman.
Según militantes de la UNFP, las tensiones existentes entre
el sector político y el sindicalista de la organización en
Casablanca han “saltado” a la capital de la Yebala, Tetuán.
El panorama en Marruecos se presenta estos días bastante
revuelto, con la huelga general (primera durante el reinado
de Mohamed VI) prevista para el día 13 y un gobierno, el de
de Abbas El Fassi, contra las cuerdas.
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