La estupefacción es uno de los sentimientos predominantes
entre los funcionarios del sector de la Justicia ante la
falta de respuesta ministerial a la huelga indefinida que
estos desarrollan en Ceuta y otras comunidades desde el
pasado lunes. La secretaria general de Justicia de UGT,
Victoria Carrer, mostró su “sorpresa ante la pasividad del
Gobierno”.
La Justicia en Ceuta funcionó ayer a regañadientes, un día
más. Ocurre así por la huelga indefinida que los
trabajadores del sector mantienen en la ciudad desde el
pasado lunes. La de ayer es la historia de más juicios,
vistas orales y hasta bodas atrasadas o suspendidas por la
falta de personal en los juzgados.
Una veintena de funcionarios de la Justicia local volvieron
ayer a concentrarse ante las puertas de los juzgados como
protesta ante el Ministerio que se niega a aumentar el
complemento específico de estos para equipararlos con los de
los trabajadores de las regiones con las competencias
transferidas.
“El ministro nos tiene sorprendidos. No sabemos cuanto
tiempo más aguantará haciéndole daño a esta administración”,
afirmó la secretaria general de Justicia de UGT, María
Victoria Carrer. Esta pidió perdón una vez más a los
ciudadanos por las molestias causadas e invitó a jueces y
secretarios a solidarizarse con ellos.
Los funcionarios movilizados celebrarán a las 12.00 horas de
hoy una asamblea para valorar la situación. Son tres días
sin percibir su sueldo y la moral de estos podría empezar a
minarse.
La Ejecutiva Regional de la Unión General de Trabajadores
(UGT) ha brindado su “apoyo incondicional” a los
trabajadores del sector de la Justicia en Ceuta que
mantienen desde el pasado lunes una huelga indefinida en
demanda de un aumento del complemento específico. Desde la
central instaron al Ministerio a “adoptar las medidas
necesarias” para acabar con esta situación.
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