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Yo creo que con toda la razón,
porque en el contrato, con el ahora técnico, no aparecía
para nada que él se tuviera que sentar en el banquillo “sine
die”, si es que el entrenador que comenzaba la temporada,
abandonaba un día el club.
Por eso tiene toda la razón del mundo el “director
deportivo”, porque él no fue fichado para entrenar, sino
para otras cosas.
Y otra cuestión es que un equipo como el Ceuta tenga la
imperiosa necesidad de tener este u otro cargo, para
funcionar bien, pero si partes de la idea de que lo vas a
tener, lo que no puedes hacer es “cargarte” caprichosamente
a un entrenador, al que has fichado, que está trabajando y
que un buen día lo pones “de patitas en la calle”, eso sí,
teniendo que pagarle hasta el último euro.
Y hay más: ¿En qué ha cambiado la situación desde que se le
dio la baja a Quintero?. En nada.
Entonces el Ceuta estaba a cuatro puntos de la zona de
ascenso y ahora está a la misma distancia. Entonces el juego
no era bonito y ahora es feo. Entonces se empató en casa,
ante el Algeciras, y ahora se acaba de perder con el
Portuense, claramente, fuera y se ha perdido en casa con el
Betis “B”.
El tiempo, juez soberano que da y quita razones, nos indica
que el señor directivo, no el presidente (debo repetirlo
porque así fue), que no aguantó más al “Coco” Quintero, se
equivocó totalmente y la jugada, a dos meses vista, le ha
salido fatal.
Por todo esto, doy la razón a José Enrique Díaz, porque
ahora su labor, la que venía haciendo, ha quedado parada y
bastante tiene con entrenar, preparar los partidos y luego
sufrir en el banquillo. Y si además tiene la mala suerte de
que el árbitro te expulsa, justamente, a un jugador, por
darle un codazo a un contrario, si tienes la otra mala
suerte de que vas a perder para dos meses, o más, a un
jugador que podía ser clave y que una enfermedad le deja
fuera de todo contacto con los demás, ya veremos hasta donde
se puede llegar.
De todas formas, el domingo viene uno de los equipos que, en
teoría, son asequibles, el Baza. Si se gana, hagan lo que
hagan los demás, se sigue fuera de los 4 primeros puestos.
Si se empata, se sigue lejos de esos 4 puestos, y si se
pierde la situación sería de alarma.
Claro que estamos en fútbol, donde dos más dos pueden ser
cuatro, pero también pueden ser siete o tres, y hasta que no
termine la competición puede ocurrir de todo, si se juega
bien. Si se juega mal o no se juega a nada ..., apaga y
vámonos.
Uno quisiera ser optimista como lo era José Enrique Díaz
cuando comentó que David Fas era algo así como el conjunto
de Figo y Beckhan, la frase era bonita pero ..., se puede
soñar despierto, ahora que tanto ... .
Estoy deseando ver por donde sale la directiva ahora, porque
hay una cosa clara: José Enrique Díaz no se encuentra a
gusto en el banquillo, los resultados indican que este no ha
sido el revulsivo que se buscaba, y si es que, de verdad, se
aspira a todo, habrá que dar una solución, especialmente
cuando son muchos los millones de pesetas que llegan en plan
de subvención y ese dinero, que nadie lo olvide, no es el
regalito del político de turno, ese dinero procede, también,
de lo que pagamos con nuestros impuestos.
La semana, se diga lo que se diga, no va a ser tranquila y
la visita del Baza empieza a pesar, antes de que llegue el
domingo.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
