Probablemente sea, con la visita
de Mariano Rajoy a la ciudad autónoma, el inicio oficial de
la pre-campaña electoral en Ceuta que nos lleve directos
hasta la fecha del 9 de marzo en la que los ceutíes, como el
resto de españoles, debamos cumplir con nuestro derecho al
voto.
La llegada de Rajoy ha procurado, una vez más, apartados en
los distintos medios de comunicación nacionales reflejando
el hecho político en torno a Ceuta y alejado de las
habituales cuestiones en las que la información general
refleja aspectos poco gratificantes para la imagen de la
ciudad. En esta ocasión Ceuta es noticia por algo tan normal
y cotidiano como el desarrollo de la pre-campaña electoral
en esa carrera iniciada por los partidos políticos en aras a
lograr una mayor representación en las Cortes Generales y
aspirar -como fin último- a gobernar España.
La breve estancia del líder del PP [que ha escogido Ceuta
entre las ciudades de España que va a visitar en esta
especial carrera hacia las urnas] es común en esta
vertiginosa campaña electoral que, aunque oficialmente no ha
comenzado, ya impregna la geografía del país. Lo importante
es estar en las ciudades calificadas de estratégicas por
este o aquel partido.
Por parte del PP la visita del presidente nacional y
candidato a La Moncloa ha cumplido ya con la más optimista
de las previsiones de campaña del partido en Ceuta.
Sin embargo, por parte del PSOE se espera la presencia de
López Garrido [destacado socialista] y no se quiere
descartar aún la presencia de Zapatero.
En cualquier caso la carrera hacia el 9-M ha comenzado y las
formaciones políticas entran en esa ‘batalla’ incruenta en
el aspecto físico aunque dura, fuerte y sin compasión en el
uso del verbo. Son momentos para saber oir y escuchar. La
última palabra la tiene el ciudadano que es quien, con su
voto, admite o critica posicionamientos políticos.
|