Esta pre campaña electoral me esta
sorprendiendo desagradablemente al observar como el
candidato a la presidencia del Gobierno del partido
socialista, José Luís Rodríguez Zapatero se ha empeñado en
retrotraernos a la España Rural con promesas que nos
recuerdan las correrías de Romanones o Romero Robledo en el
que compraban el voto de los desfavorecidos campesinos.
Devolver 400 euros del IRPF al contribuyente es una
propuesta surrealista, totalmente absurda y demagógica que
muestra, una vez más, la verdadera imagen de un Gobierno
incapaz de elaborar un programa electoral realista y
desarrollable y que además, cuenta con el rechazo del
vicepresidente económico, Pedro Sol Solbes al conocer que
esta medida agravará nuestra actual crisis económica.
Estas propuestas me recuerdan las efectuadas durante la
última campaña electoral en nuestra Ciudad cuando
prometieron entre otras muchas, bonificación al 50% en las
cuotas a la Seguridad Social a todos los sectores
económicos, la puesta en marcha de medidas concretas en los
primeros seis meses de Gobierno o la construcción de tres
institutos. La ciudadanía debería reflexionar seriamente en
relación a estas promesas efectuadas por el partido
socialista comparándolas con las realizadas en campañas
anteriores y decidir el sentido de su voto. Este ejercicio
comparativo debería incluir todas las actuaciones efectuadas
por el Partido Popular en beneficio de nuestra Ciudad
durante los gobiernos de José María Aznar.
En definitiva, somos los ciudadanos quienes debemos decidir
con toda la información posible la credibilidad de las
propuestas electorales efectuadas por las diferentes
formaciones decidiendo quien merece nuestra confianza.
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