sucesos - VIERNES, 25 DE ENERO DE 2008

CEUTA
Sheila Anaya
local@elpueblodeceuta.com

Un individuo fue ayer procesado por el Juzgado de lo Penal número 1 por un delito de atentado y falta de lesiones. Los hechos ocurrieron la pasada Nochevieja, cuando el acusado comenzó una discusión con dos agentes de la Policía Local que habían acudido a la plaza Mina por el alto volumen de la música de un pub.

El Juzgado de lo Penal número 1 de Ceuta celebró ayer el proceso de un invididuo que supuestamente agredió a dos agentes de la Policía Local durante una discusión, hechos por los que fue detenido. Así, el acusado se presentaba ante el Tribunal imputado por un delito de atentado y falta de lesiones.

Los hechos ocurrieron la pasada Nochevieja en torno a las cuatro de la mañana. En ese momento, el acusado, M.A.P.C., se encontraba en la plaza de Mina con un grupo de amigos celebrando las fiestas en la terraza de un pub. En ese momento se personaron en el lugar de los hechos dos agentes de la Policía Local que habían sido llamados por los vecinos de la zona por el nivel de la música del local. Según el acusado, los agentes llegaron a la plaza mostrando “una actitud chulesca”, a lo que él les dijo “que se tranquilizaran”. Según este testimonio, los agentes le pidieron la documentación y recibió un empujón de uno de ellos. Inmediatamente, los policías apartaron al acusado hacia una zona apartada de la plaza en la que comenzó un forcejeo. El detenido fue trasladado por el coche policial y llebado al ambulatorio José Lafont, donde se negó a recibir asistencia médica. Después fue llevado a la Comisaría, detenido por interferir en la labor policial.

Sin embargo, esta versión es totalmente opuesta a la de los agentes, quienes reiteraron en diversas ocasiones que el acusado comenzó a insultarles en cuanto se personaron en el lugar, por lo que debido al escándalo, le pidieron que se apartara para poder proceder a su identificación “en buenas condiciones”. Según uno de los policías, en ese momento el acusado le empujó contra un árbol. Los dos agentes presentan un parte de lesiones una mano. Asimismo, también afirmaron que en un primer momento no hicieron caso de los insultos al tratarse de unas fiestas tan señaladas y que no entendían por qué se había metido en su labor.

Por último, el cuñado del acusado, que testificó en el juicio, declaró que éste no estaba borracho. El abogado de la defensa pidió la absolución, mientras que el ministerio fiscal pidió una pena mínima y una multa por el altercado ocurrido. El caso quedó visto para sentencia.
 

Dos personas más son condenadas por tráfico de hachís

Además, este Tribunal realizó otros procesos que quedaron en conformidad. En dos de ellos, se trataron delitos contra la salud pública perpetrados por dos ciudadanos. El primero de ellos, A.E.A., llegó a un acuerdo con el fiscal, debiendo cumplir una pena de tres años y seis meses de prisión, además de pagar una multa de 53.685 euros, equivalente al valor de la droga. No obstante, el acusado se declaró insolvente, por lo que permanecerá en prisión tres días más. Fue detenido en un control policial llevando en su vehículo casi 40 kilos de hachís. Por su parte, I.L., deberá cumplir tres años y dos meses, después de que la Guardia Civil registrara su vehículo y encontrara 17 kilos de hachís procedentes de Marruecos. Por ello, el acusado también deberá pagar una multa establecida en 23.349 euros.