El viceconsejero de Deportes de la Ciudad Autónoma, Víctor
Íñiguez, ha presentado en los Juzgados una demanda contra el
presidente de la UDCE, Mohamed Ali, por decir en un programa
de televisión durante la campaña electoral que precedió a
las elecciones autonómicas del pasado 27 de mayo que había
“metido la mano en la caja”.
El asunto, que imputa a Ali como presunto culpable de un
delito de difamación y coacción, puede tener en realidad más
recorrido del previsto. Si el eurodiputado del PP Díaz de
Mera se metió en un fregado considerable al decir ante el
juez que alguien cuyo nombre no quiso desvelar le había
dicho algo muy gordo es más que previsible que la defensa
del líder de la oposición en la Asamblea pida al Tribunal
que deduzca testimonio también en este caso y abra
diligencias paralelas con el fin de esclarecer si lo que
dijo Ali responde o no a la realidad.
El presidente de la UDCE se remontó en una entrevista al
presunto cobro irregular de trienios por parte de Íñiguez
por un montante total de 21.000 euros sin la documentación
correspondiente para avalar su percepción excepto la
expedida por el jefe de Nóminas de la Ciudad, Francisco
Martínez Racero. Intervención de la Ciudad Autónoma, que no
había autorizado dicho cobro, instó al viceconsejero a
devolver dicha cantidad a las arcas municipales, algo que
hizo.
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