Escribo este artículo antes de que
los partidos políticos den los nombres de quiénes irán, a
las próximas elecciones generales, de diputados o senadores.
Algunos lo tienen de una claridad meridiana, mientas otros
no lo tienen tan claro y esperarán a última hora, para
decidir quién o quiénes serán sus representantes.
Me da la sensación, no extraña, que los populares
presentarán a diputado a Francisco Antonio González. Por
acertar esto les ruego, encarecidamente, no me vayan a tirar
bocadillos de jamón. Aunque acierte, ustedes hagan como si
no se hubiesen enterado de lo que he dicho ni, por supuesto,
del nombre que he dado, para ser el candidato por Ceuta del
Partido Popular.
No crean que no he tenido que hacer grandes estudios para
llegar a la conclusión de que, Francisco Antonio González,
sería el candidato elegido para diputado por los populares.
Han sido horas y horas de profundos estudios sobre todos los
nombres que se barajaban para tal cargo. Y al final, después
del gran esfuerzo intelectual realizado, he llegado a la
conclusión de quién sería el candidato elegido, Francisco
Antonio González.
Les ruego, encarecidamente, que el nombre del candidato que
les he dado, no lo hagan público porque se lleva en el mayor
de los secretos, y es uno de los ases que tenían los
populares en la manga para sorprender a los contrarios. Si
les he dado el nombre del candidato es, simple y llanamente,
porque no les puedo negar nada a mis lectores. Ahora, eso
sí, les ruego y les reitero sepan guardarme en secreto el
nombre del candidato, hasta que los populares lo hagan
oficial.
No nos adelantemos a los acontecimientos, porque los errores
en política se pagan a muy alto precio. No vaya a ser que
por una indiscreción, por nuestra parte, le demos a conocer
a los contrarios quién será el candidato a diputado por
Ceuta de los populares. Que aquí todo se sabe y no quiero
que por nada, nos vayan señalando por la calle diciendo:
“Esos son los culpables de haber descubierto quien era
nuestro candidato”. Que ya lo decía la sabia de mí abuela:
“en boca cerrada no entran moscas”. Insisto, silencio total
sobre el asunto, que todo lo dicho incluido el nombre del
candidato se quede entre nosotros. Gracias.
Hombre, las cosas caras, hay que reconocer que, Francisco
Antonio González, por los años que lleva ejerciendo de
diputado, se tiene que mover por el Congreso como pez en el
agua. Servidor, con perdón, cree que de tanto andar por los
pasillos, de un lado a otro, se debe conoce hasta el número
de losetas que hay de un despacho a otro.
La veteranía es un grado y los populares deben aprovechar y
sacar todas las ventajas que esa veteranía conlleva. Además,
que digo yo, si no ponen a Francisco Antonio González, a
quién van a poner. Pensándolo bien, según esta decisión de
los mandas de los populares, en nuestra tierra, es que no
tienen otra persona capacitada para ser candidato a diputado
y por eso repiten con el mismo. El problema se les va a
presentar cuando Francisco Antonio se jubile. Claro que eso
será dentro de cien años. O sea que hay tiempo para buscar
otro candidato.
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