La Ejecutiva de la Unión Demócrata Ceutí (UDCE) con su
presidente, Mohamed Ali, al frente, ha decidido desechar la
posibilidad de entrar en el Gobierno del Partido Popular que
preside Juan Vivas, tal y como se le había invitado a hacer
desde su cúpula, y seguir trabajando en solitario.
La decisión definitiva se ha tomado, según explicaron ayer
fuentes de la Dirección Política del partido, tras escuchar
la opinión manifestada por los 700 afiliados y los 300
simpatizantes de la UDCE que fueron encuestados de forma
presencial durante los últimos días de diciembre y los
primeros de enero, el 60% de los cuales se mostró contrario
a entrar a formar parte del Consejo de Gobierno de la Ciudad
Autónoma.
Un 30% de los encuestados consideró, sin embargo, que le
parecería bien un acuerdo de estas características, mientras
que un 7% aseguró que era indiferente al asunto y un 3% se
apuntó al ‘No sabe/No contesta’ de rigor.
O sea, que no, que después de tanto chiste y tanta
habladuría al final va a ser que no, pero sin acritud.
Dirigentes del primer Grupo de la oposición manifestaron
ayer su “satisfacción” por el tono en el que se han
desarrollado las conversaciones entre los dos partidos
después de que esta misma semana UDCE comunicase su decisión
definitiva al Partido Popular y alabaron la “comprensión”
del partido en el Gobierno hacia su posicionamiento final.
El voto a los Presupuestos, bien
La encuesta en conjunto, sin embargo, revela que la
distancia entre los dos principales partidos con
representación en la Asamblea no es tan abisal como podría
parecer si se revisan algunos párrafos de las hemerotecas.
Además de por la posibilidad de entrar en el Gobierno de
Ceuta, UDCE interrogó a sus bases sobre qué opinión les
mereció su voto a favor de los Presupuestos de la Ciudad
para 2008 a cambio de la implantación del salario social
desde el próximo otoño, el compromiso de ejecución de
inversiones por valor de varios millones de euros en el
Príncipe y la implantación gradual de aquí a 2010 de la
gratuidad universal de los libros de texto.
Más de la mitad de los mil encuestados, concretamente el
51%, opinó a los encuestadores de UDCE que le parece “bien”
el respaldo manifestado en la Asamblea a dicho documento. Un
tercio de los entrevistados (35%) afirmó que le pareció
“mal” el sentido del voto de la coalición y un 16% dijo ser
indiferente al respecto.
Por último, la tercera cuestión fundamental de la encuesta,
realizada de forma presencial a domicilio y por teléfono,
fue la relativa a qué postura se sentían más proclives los
militantes y simpatizantes de la formación de cara al
futuro.
Los porcentajes fueron, una vez más, muy similares: el 60%
de la muestra se inclinó porque UDCE siga trabajando
políticamente “en solitario”. Un 30% declaró ser favorable a
que la Ejecutiva del partido busque “pactos” con otras
fuerzas políticas (sin especificar con cuáles) y un 10%
prefirió no responder o señaló que le da igual.
Valoración de líderes
La encuesta incluyó también una pregunta con respecto a cuál
de los líderes políticos ceutíes es más valorado por la
militancia del partido. Los encuestados, que sólo tenían la
posibilidad de mencionar un nombre, votaron como era de
esperar mayoritariamente por Mohamed Ali.
Tras él se posicionó el presidente de la Ciudad, Juan Vivas,
que junto a su vicepresidente, Pedro Gordillo, a otros
miembros del Gobierno ceutí y al coordinador general de IU-Ceuta,
Mohamed Haddu Musa, participaron en varias de las reuniones
donde se intentó fraguar la entrada de la coalición en el
Gobierno. Aróstegui, del PSPC, fue el tercer político más
citado.
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El resultado de la encuesta “no agrada” al Partido Popular
El vicepresidente del Gobierno
ceutí y máximo responsable del PP a nivel regional, Pedro
Gordillo, aseguró ayer en declaraciones a la agencia EFE que
el resultado de la encuesta organizada de la UDCE “no me
agrada porque todo lo que sea positivo es bueno y este
resultado no lo es”. Gordillo dijo preferir “no opinar”
sobre el contenido del sondeo realizado entre 1.000
militantes y simpatizantes de la UDCE, pero manifiestó que
“deben ser ellos los que tienen que valorar si es un buen o
un mal resultado”. El dirigente señaló que el ‘pacto de la
convivencia’ propuesto “tiene su base fundamental en creer
en la convivencia y el deseo de que sólo exista un pueblo,
por lo que el PP quiere creer en eso y que haya una unión”.
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