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David Meca añadió una hazaña más a su larga lista de proezas
al cruzar tres veces el Estrecho de Gibraltar. El nadador
catalán de 33 años inició el reto a las 9.35 horas en la
playa Chica de Tarifa y al filo de las diez de la noche
entró en una abarrotada playa de La Ribera, donde más de mil
personas no cesaron de animar y vitorear a Meca.
El campeón del mundo en aguas abiertas llegó a la orilla por
su propio pie y de inmediato fue atendido por dos
voluntarios de la Cruz Roja al encontrarse muy cansado
después de más de 12 horas en el agua. Una ambulancia de
Cruz Roja lo trasladó al Hospital Civil, tras ser atendido
unos minutos en una carpa instalada en la propia playa. Meca
llegó al hospital muy fatigado y con síntomas de hipotermia
quedando ingresado en la sala de observación del servicio de
urgencias. Su padre le acompañó en todo momento desde una de
las embarcaciones que siguió al nadador y lo pasó muy mal
cuando en el tercer cruce del Estrecho David recibió un
golpe de una zodiac en la espalda, además de los calambres
que tenía en todo el cuerpo. El gran nadador desoyó el
consejo de la organización, que le instó a abandonar a unas
ocho millas de Ceuta por las malas condiciones del mar con
corrientes que le arrastraban al Mediterráneo y con fuerte
viento de poniente. David Meca se empeñó en culminar el
triple cruce del Estrecho, algo que nadie había hecho hasta
ahora, y regresó a las frías aguas para completar el
recorrido, unos 60 kilómetros, llegando a La Ribera
exhausto, pero feliz por la gesta. El presidente de la
Ciudad Juan Vivas tiene previsto felicitar hoy al nadador
catalán, que ya había estado en Ceuta en distintas
ocasiones; la última en la travesía a nado del puerto.
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