PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

cultura - VIERNES, 28 DE DICIEMBRE DE 2007


alumnos en clase. archivo.

‘Curso de Formadores para la Convivencia’
 

La convivencia como
elemento educador

El profesor del Camoens, Manuel Calleja Salado, iniciará en enero la segunda etapa del curso organizado por el MEC que supondrá la formación en cascada al profesorado para fomentar la tolerancia entre el alumnado
 

CEUTA
David F. Pascual

local
@elpueblodeceuta.com

Las aulas de los centros educativos están siendo noticia en los últimos tiempos por incidentes protagonizados por alumnos y profesores. Una serie de actos de acoso, violencia y fracaso escolar contra los que quiere luchar la Administración. Uno de los elementos diseñados por el Ministerio de Educación es el ‘Curso de Formadores para la Convivencia Escolar’ cuya primera fase se puso en marcha el año pasado con la presencia de dos representantes ceutíes: el profesor del Instituto Camoens, Manuel Calleja Salado, y un representante de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) de la ciudad.

Bajo la fórmula de la formación en cadena, el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC) pretende instruir a los padres y a los educadores para que estos mismos puedan ser los que, a través de una serie de programas en casa y en las aulas, fomenten valores de convivencia y tolerancia entre los más pequeños. Así, el MEC calcula que a lo largo del curso 2007/2008 y con la formación en cascada, unos 15.000 docentes serán instruidos. Los encargados de hacerlo serán profesores como Calleja Salado, uno de los 62 participantes en la primera fase de instrucción organizada por el Ministerio.

Otro de los instrumentos que el Ministerio ha puesto en marcha para eliminar los problemas radicados en las aulas es el Observatorio para la Convivencia. Esta herramienta sirve para la recopilación de datos y documentación de cara a analizar la evolución de la violencia escolar en los centros del país.

El representante ceutí explicó a EL PUEBLO que esta segunda etapa se iniciará en el mes de enero o de febrero “a más tardar”, aunque precisó que es una decisión que dependerá de la Dirección General del Ministerio en Madrid. Según explicó Calleja Salado, la intención es la de instruir a representantes de todos los centros educativos de la ciudad. No obstante, la selección es una materia que compete también al MEC. Una vez se transmitan los conocimientos a los nuevos participantes, éstos tendrán que confeccionar, en horas libres de su labor docente, un plan de convivencia específico para su centro. El periodo de formación no será excesivamente largo ya que, según confesó Calleja Salado, “tenemos ganas de empezar a trabajar con los alumnos”.

Un curso entero de formación

Este profesor sevillano recordó cómo decidió participar en esta iniciativa pionera del Ministerio de Educación. “Entré a formar parte del programa por una invitación formal que me hizo el jefe de la Unidad de Programas de la Dirección Provincial”, reseñó. No es menos cierto que este reunía los requisitos que el MEC buscaba, entre los que destacaba su experiencia y su calidad de docente en activo.

Una vez dentro, la etapa de formación a los instructores de las 18 autonomías participantes (todas salvo Madrid) se desarrolló durante casi un curso académico. Ello suponía desplazamientos a la capital varios fines de semana al año, según explicó.

Calleja Salado encontró “positivo” que la participación en el programa no se haya enmarcado sólo a los docentes de la Enseñanza Pública. “La etapa de formación ha contado con la presencia de representantes de confederaciones y federaciones de centros privados. Esto ha hecho que se trate de un programa con un diseño muy amplio y plural”, valoró. Esta circunstancia significa, para el docente, aportar nuevos prismas de visión y de solución de problemas.

El programa se ha configurado para ser abierto y heterogéneo. Así, no habrá un modelo único de formación en convivencia para todo el territorio de aplicación. Haberlo echo de otra forma habría sido un “error”, según Calleja Salado, puesto que existe una gran diversidad a lo largo y ancho del país y en cada uno de los centros de las comunidades.

Una vez finalizada la etapa de formación a los instructores representantes de las regiones participantes es tiempo de hacer valoraciones. El docente ceutí quedó satisfecho de dicho periodo y consideró que en términos la calidad de las ponencias y de los asistentes al curso fue “máxima”. Además destacó que se plantearon debates “muy enriquecedores”.

Ceuta no es tan distinta al resto

La etapa inicial del programa posibilitó la presencia de representantes de todas las regiones en un foro de debate sobre la educación. La exposición de las problemáticas de los docentes ha servido al profesor del Camoens para concluir que los puntos débiles de la Educación ceutí no son tan diferentes a los que puedan darse en territorios cercanos como Andalucía. “La heterogeneidad cultural de Ceuta no implica, como algunos pueden llegar a pensar, unas formas de convivencia diferente, más bien los contrario”, sentenció.

Calleja Salado se refirió a elementos como el informe del Defensor del Pueblo para sostener su teoría. Según la documentación examinada por el docente del Instituto Camoens, los datos recogidos en el último informe del Defensor del Pueblo no denotan diferencias específicas.
 


Manuel Calleja Salado, el primer eslabón de la cadena de instrucción

Manuel Calleja Salado, profesor de Filosofía del Instituto de Enseñanza Secundaria Camoens es el primer eslabón de una cadena de instrucción. Este sevillano cuenta con cuatro años de experiencia docente en Ceuta. Un tiempo que ha dedicado en exclusiva al Camoens ya que no ha pasado por ningún otro centro. Calleja Salado es de la opinión de que Ceuta cuenta con sus especificidades pero no resultan en diferencias significativas con respecto a las problemáticas que subyacen en los centros educativos de las regiones cercanas. Este se mostró gratamente impresionado por la calidad humana de los distintos componentes de la comunidad educativa de la ciudad. Es uno de los motivos por los cuales se siente a gusto en Ceuta y no piensa en marcharse a otra ciudad.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto