Fiel al espíritu del cuento de Hoffmann, el director
David Campos ha trabajado con la magia de la obra situando
la acción en Navidad, pero en un contexto muy diferente al
habitual. El coreógrafo se ha rodeado para este proyecto de
jóvenes talentos muy alejados cultural y estéticamente del
ballet, hecho que provoca que sea, sin lugar a dudas, una
mirada muy personal, tal y como han reflejado las críticas
que ha sucedido a la obra tras su estreno en la península.
El diario El País, por ejemplo, tituló la crítica como un
“Sugestivo montaje”. Así, la crítica Carmen del Val señaló
en sus páginas que es “una moderna, emotiva y dinámica
versión”.
“El secreto de esta versión, alejada de los fastuosos y
tradicionales montajes que suelen ofrecer las grandes
compañías de ballet, es su frescura y espontaneidad, además
del acierto del coreógrafo al trasladar la acción a la
actualidad, concretamente al suburbio de una gran ciudad, lo
que imprime dinamismo a la obra”, escribió Del Val.
Por su parte, El Periódico de Catalunya también repartió
buenas críticas para la adaptación de David Campos:
“Ciñéndose a la realidad de su perfil de compañía y a la de
los medios escénicos disponibles, ha creado una versión de
El cascanueces urbana y actual, con una plástica
contemporánea en la que prevalece un trabajo audiovisual
ideado para dar solución a unos fragmentos originales que
requieren una gran producción”.
“La compañía supera con creces los retos y ofrece una
representación donde lo mejor se halla en el nivel y
homogeneidad que exhiben sus bailarines”, concluye.
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