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La Cruz Roja consiguió el jueves por la noche la segunda
mejor marca de la historia en los concursos de telemaratón.
La institución dirigida por el hermano Aurelio rebasó la
cifra marcada este año para poder llevar a cabo el objetivo
de esta Navidad.
La idea de esta temporada consistía en proporcionar de un
ascensor a la casa que la Cruz Blanca posee en el edificio
del Sardinero para los más desfavorecidos. En este lugar
conviven personas mayores, muchas veces incapacitadas y la
llegada de un ascensor se antoja fundamental para su vida
diaria. Cruz Blanca cuenta con dos pisos, la planta primera
y segunda, pero, tal y como dice el hermano Aurelio, las
veces que uno de ellos ha sufrido alguna lesión, “la tarea
de subirlos a la casa se hacía imposible”. Sin embargo, aún
pasará algún tiempo hasta que los ascensores sean una
realidad, ya que, aunque se ha contactado con la empresa
Otis para la instalación, no se ha mantenido un contacto
definitivo con el ingeniero encargado de acometer la obra.
El montante conseguido durante el telemaratón ascendió a más
de 68.000 euros.
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solidaridad
