Los centros docentes de nuestra ciudad están terminando el
primer trimestre del curso 2007/2008 y lo están haciendo con
la mirada puesta en estas vacaciones de Navidad y Reyes que
el próximo viernes cogerán. Precisamente, gracias a estas
vacaciones navideñas, muchos de estos centros docentes
celebran concursos, teatros, y un sinfin de activdades
relacionadas con la Navidad. Este fue el caso ayer del
colegio San Daniel, donde los más pequeños saltaron al
escenario del Salón de Actos para interpretar una función
relacionada con el nacimiento de Jesús y con la llegada de
los Reyes Magos.ç
Decenas de padres se dieron cita ayer en el colegio San
Daniel para asistir a las funciones de teatro preparadas y
realizadas por los alumnos de Educación Infantil.
Los pequeños de 3, 4 y 5 años saltaron al escenario para
escenificar el nacimiento de Jesús, aquella mágica noche del
24 de diciembre.
Primero le tocó el turno a los más mayores de Infantil, los
alumnos de cinco años, los cuales de la mano de sus
profesoras fueron desarrollando con gracia y salero todo el
guión de la obra.
Padres, madres, abuelos, abuelas, hermanos, etc., de todos
los chavales que ayer vivieron este emotivo acto aplaudieron
y rieron al ver a sus hijos realizando esta pequeña función.
La sesión que más público congregó fue la realizada por los
alumnos de 3 años de edad, donde un experto narrador de
cinco años iba leyendo lo que iba a suceder en una historia
donde se entremezclaba con gracia los tiempos modernos con
la época de Jesús.
Aparecieron José y María, con un Nenuco en brazos que era
Jesús, montados en el caballito balancín de ‘Chico’ y muy
metidos en el papel le dijeron al público que debían llegar
a Belén.
Posteriormente aparecieron los tres Reyes Magos que,
montados en sus triciclos, comentaban que no llegarían nunca
a adorar al niño, de ahí que seguidamente un piloto
aterrizara con su avión y todo para acercar a Sus Majestades
hasta el pesebre y allí hacer sus ofrendas.
A partir de ahí fue cuando los jóvenes pastores y pastoras
fueron haciendo acto de presencia en el escenario para entre
todos y en pequeños grupos ir felicitando estas Navidades.
Poesías y villancicos, todos ellos adornados con pequeñas
coreografías o escenografías, arrancaban los aplausos de
esos padres emocionados que con miradas de borreguitos
dejaban escapar, algunos con lágrimas otros con risas, la
alegría de ver a sus pequeños realizar su primer acto social
de gran calado.
Los chavales, casi en su totalidad, disfrutaron mostrando a
los asistentes lo que habían aprendido para estas Navidades,
aunque también hubo algunos que al ver tanto público se
asustaron y lo pasaron mal sobre el escenario, pero para
todos ellos desde este rotativo se les manda un fuerte beso
porque lo hicieron magníficamente y están empezando a vivir
lo que es la Navidad, esta tradición que llega al corazón.
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