Uno de cada diez adultos ceutíes no pudieron recibir
tratamiento dentral el año pasado según la Encuesta de
Condiciones de Vida con datos relativos al año pasado que el
Instituto Nacional de Estadística (INE) hizo pública esta
semana. De ellos, más de la mitad, concretamente el 63,5%,
adujeron para explicar por qué no habían acudido al dentista
que no se lo pueden permitir económicamente, algo que no es
extraño si se tiene en cuenta que en 2005 el gasto anual
medio en España por asistir al dentista se elevaba ya a 315
euros.
El porcentaje, compartido con Melilla, de mayores de 18 años
que no fueron al odontólogo porque no tenían dinero para
hacerlo es con mucho el más alto de toda España, por delante
de Canarias (60%), Andalucía (54%) y Cataluña (48%), las
comunidades que siguen más de cerca a las ciudades autónomas
en esta estadística.
En términos generales, sin embargo, el porcentaje de
población que no recibió tratamiento de salud bucodental en
2006 en Ceuta no es el más alto de toda España. En Canarias
(13,1%) y Baleares (11,7%) la población registró aún menos
asistencia a este tipo de consultas, aunque sólo en el caso
canario destaca como motivo principal el económico. En el
archipiélago balear sólo un 29,6% de los que no fueron al
dentista dijeron no haberlo hecho por falta de liquidez,
mientras que un 17,2% adujo falta de tiempo y un 53,2%
“otros motivos”. A nivel nacional la tasa de adultos que no
pudo ir al dentista el año pasado fue 2 puntos porcentuales
inferior (8%) a la ceutí y los que esgrimieron la causa
económica como justificante sólo fueron 4 de cada 10.
Y es que cualquiera que lo ha sufrido sabe lo que cuestan
los dientes. Según un estudio del Colegio Oficial de
Odontólogos de Cataluña (COEC) una cuarta parte de lo que
gastan los españoles en sanidad, incluyendo la farmacia y
las consultas médicas de seguros privados, se dedica al
dentista.
En ese informe, en el que se subraya la precariedad de la
asistencia bucodental de la sanidad pública, por la que sólo
pasan el 11% de las consultas totales (el 60% son de
carácter privado), ya se citaba a ceutíes y melillenses como
los menos cuidadosos con la salud de su boca mientras que
los más asiduos a estas consultas son los asturianos y
vascos, liderazgo que el INE atribuye ahora a riojanos y
cántabros, donde menos de un 5% de su población adulta no
fue al dentista en 2006 pese a necesitarlo. El Plan de Salud
de la Ciudad que pasará por Pleno el 18 de diciembre
contempla una medida especial dirigida a fomentar la salud
bucodental de la población escolar encaminada a sensibilizar
a los padres sobre la importancia de los hábitos higiénicos
dotada con 98.400 euros.
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Cofinanciación para atender a los niños de 7 a 15 años
El ministro de Sanidad, Bernat
Soria, anunció el pasado mes de octubre que a partir de 2008
los niños de entre 7 y 8 años podrán acudir gratis al
dentista, tratamiento que financiarán a partes iguales el
Ministerio y las Comunidades Autónomas. El Plan de Salud
Bucodental, aprobado por el Consejo Interterritorial de
Salud, incluye limpiezas, extracciones y empastes, con un
presupuesto de 12 millones en los presupuestos de 2008. Cada
año se incorporarán al plan los niños de esa edad, de manera
que dentro de siete años estarán cubiertos todos los menores
entre 7 y 15 años. Soria calculó un gasto medio por niño de
45 euros y señaló que se cofinanciará “por niño atendido, no
por población total”, al tiempo que destacó que el Plan
pretende igualar la prestación por territorio y que no haya
diferencias de asistencia a niños “sólo porque viven en
comunidades distintas”.
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