Mucho más comedido verbalmente que el delegado del Gobierno,
el presidente de la Ciudad cerró ayer los actos
institucionales organizados en la Asamblea para conmemorar
el XXIX aniversario de la Constitución con una llamada a
“distinguir, en beneficio de los ciudadanos, lo sustancial
de lo superficial”. “La lealtad institucional es un valor en
sí mismo y la Constitución fue de todos y debe seguir siendo
de todos”, se felicitó el presidente de la Ciudad por la
celebración conjunta: “La disparidad de criterios y el
consiguiente debate”, advirtió, “es imprescindible porque
enriquece la actividad política y la toma de decisiones,
pero igualmente necesario es tener altura de miras para
entender que, en determinadas circunstancias y en asuntos
esenciales, el acuerdo es, más que una opción, una
necesidad”.
Entre esos asuntos “esenciales” Vivas citó los
“pronunciamientos” básicos de una Constitución que reconoció
“mayor de edad, madura y plena”: la dignidad de la persona y
los derechos como base del orden político y la paz social;
la convivencia democrática enigualdad, justicia y libertad,
con soberanía popular y división de poderes; la igualdad
ante la ley y la unidad de España como “patria común e
indivisible de todos los españoles. “Cada vez son más los
que no conocieron la situación anterior y conviene
recordarles que la Constitución supuso un cambio
fundamental, y para bien”, resumió Vivas.
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