Tras una profunda reflexión en
relación al trabajo desarrollado desde la oposición debo
afirmar que su labor es bastante más sencilla que la del
equipo de Gobierno, aseveración por otro lado, evidente e
indiscutible por muchas razones.
Afirmación resultado del análisis detallado de las
innumerables peticiones realizadas tanto en sesiones
plenarias como en comparecencias ante los medios de
comunicación en las que estas formaciones formulan mociones
sin cuestionarse requisitos presupuestarios, legales o
reglamentarios totalmente imprescindible para conocer su
viabilidad.
Sin ir más lejos, recordar la última petición realizada por
juventudes socialistas en las que exigen al Gobierno de la
Ciudad exenciones fiscales en el pago de las Tasas por
prestación de servicios encomendados a empresas y organismos
autónomos aprobadas en el Pleno de la Asamblea de la Ciudad
de Ceuta en sesión extraordinaria celebrada el día 18 de
diciembre de 1998 amparada en lo dispuesto en los artículos
15 a 27, ambos inclusive, y 58 de la Ley 39/1988, de 28 de
diciembre, reguladora de las Haciendas Locales.
Debo aclarar que, estas peticiones son electoralistas,
evidentemente del agrado de la ciudadanía y por tanto,
populistas aunque, debo significar el escaso compromiso que
dichas formaciones tienen con los ceutíes al realizarlas ya
que, en la mayoría de las ocasiones son irrealizables por
los motivos expuestos anteriormente; incumplimiento de
acuerdos plenarios, legislación vigente y por supuesto,
inviabilidad presupuestaria.
En definitiva, la labor de la oposición debe ser realista,
congruente y reflexionada al objeto de evitar engaños a una
ciudadanía que perdió, hace tiempo, la confianza en estas
formaciones relegándolas a una mínima representación
parlamentaria.
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