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El Gimnasio Goyu-Ryu tuvo el comienzo soñado ya que en un
encuentro que se esperaba muy difícil por la lluvia caída
sobre la ciudad, Alfredo, consiguió a los cinco minutos el
primer gol para los locales. El jugador ceutí, que no
lograba conseguir un gol desde la segunda jornada, consiguió
en una contra perfecta batir al guardameta Sergio del
Granada Atlético.
Con el gol inicial el equipo amarillo siguió durante los
siguientes quince minutos atacando la puerta granadina
gracias a la gran presión de los centrocampistas locales no
dejando salir en ninguna jugada a los andaluces. Oli y
Mohamed conseguían desbordar desde la banda a los laterales
del conjunto de Alberto González que solo podían despejar
balones. Pasado el aluvión ofensivo del conjunto gimnasta
llegaron los mejores minutos del Granada gracias a que sus
jugadores comenzaron asentarse en el terreno de juego y a
lograr jugadas más por fuerza que por calidad, ya que el
terreno de juego tampoco daba para muchas florituras, en las
que se acercaban a las inmediaciones de Munir.
El capitán del Goyu, Alfredo, siguió provocando temor en la
defensa granadina con disparos lejanos. A quince minutos del
final el colegiado penalizó al guardameta andaluz con libre
indirecto dentro del área por mantener el cuero durante más
de seis segundos en las manos. Oportunidad que desaprovechó
Juan Antonio que mandó a la derecha. Solo dos minutos
después el Granada tuvo el empate pero cuando el remate de
Migue parecía una realidad, Panadero, sacó sobre la línea. Y
tras las últimas jugadas de la primera mitad el colegiado
pitó el final suspendiendo la segunda mitad por el estado
del terreno de juego.
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“Conseguimos el objetivo que nos planteamos con el gol del
inicio”
El entrenador del Gimnasio Goyu
Ryu, Manu León, se mostró contento por la primera mitad
realizada por sus jugadores ya que según León “su equipo fue
durante los primeros veinte minutos muy superior al equipo
granadino”. Con un terreno de juego casi impracticable desde
el comienzo valoró aún más el trabajo de sus jugadores ya
que no mostraron ningún síntoma de cansancio pese a que el
terreno de juego se mostró muy pesado por la lluvia. Con el
paso de los minutos el equipo fue bajando la presión lo que
provocó que comenzarán a pasarlo mal los gimnasta, algo que
dejó con dudas al técnico ya que al no conseguir un segundo
tanto temía que los andaluces empataran. Por último León
mostró su conformidad con el árbitro por la suspensión.
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DIVISIÓN DE HONOR de juveniles grupo iv
