En alguna ocasión he reflexionado
en relación a la capacidad política que atesora José Antonio
Carracao, Secretario General de Juventudes Socialistas y
previsiblemente unos de los líderes que saldrá elegido tras
el próximo congreso socialista. Descendiente de políticos
ilustres, ex asesor de Maria Antonia Palomo y actual asesor
en Delegación del Gobierno, trayectoria que le confiere la
experiencia necesaria para alcanzar metas importantes en un
entorno tan exigente como el político.
La llegada de Salvador de la Encina a la dirección de la
gestora en nuestra Ciudad ha catapultado a José Antonio
Carracao convirtiéndolo en la única voz autorizada de esta
formación, monopolizando toda la actividad política de los
socialistas ceutíes.
No obstante, la pertenencia a una formación de ámbito
nacional le supone aceptar determinadas imposiciones
provenientes de la dirección en Madrid y con ello,
desprestigiarse al tener que comparecer ante los medios de
comunicación para alabar las excelencias de la política
desarrollada en nuestra Ciudad en los últimos años por José
Luis Rodríguez Zapatero.
Simplemente, recordar las promesas contenidas en el programa
electoral con el que los socialistas ceutíes concurrieron a
las últimas Elecciones Generales demuestra el desacierto de
Carracao. Promesas incumplidas como bonificar al 50% las
cuotas de la Seguridad Social a todos los sectores
económicos de la Ciudad, la puesta en marcha de medidas
concretas en los primeros seis meses de Gobierno para
resolver la crisis comercial o la reconversión en zona verde
del Vertedero de Santa Catalina.
En definitiva, José Antonio Carracao debería reflexionar
detenidamente respecto al contenido de las comparecencias y
seleccionar pausadamente en cuales debería tener presencia
física para no devaluar el concepto que la ciudadanía esta
adquiriendo sobre él.
|