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Carolina Pérez, consejera de Bienestar Social, acudió ayer
al Edificio Polifuncional de la barriada Príncipe Alfonso en
la presentación del programa -en el área infantil-
‘Renuévate’. Son 40 chicos de este distrito los que
participan en el proyecto, que comenzó en abril y que
concluye en diciembre. Pérez apuesta por la continuidad de
la iniciativa, ya que los niños tocan valores como la
solidaridad y el compañerismo.
El programa ‘Renuévate’ puede darse por satisfecho cuando se
llevan a cabo prácticas tan formativas y alentadoras como la
que tuvo lugar ayer en el Edificio Polifuncional de la
barriada del Príncipe Alfonso. En total, 40 alumnos de este
distrito culminaron con sus actuaciones un proceso educativo
que comenzó en abril y que se extenderá hasta diciembre,
pero que probablemente se “renueve”, según comentó la
consejera de Bienestar Social, Carolina Pérez, que acudió a
la cita. “Apostamos porque se renovará el programa” y, en
vistas de lo que disfrutó la consejera con la actuación de
los niños, parece que así se hará. “No cabe duda de que todo
lo que vaya en pro de la educación es muy positivo. Esto es
un refuerzo educativo y hay valores en los que se hace
hincapié, como la tolerancia, el compañerismo, la
responsabilidad y, además, tiene mucha aceptación”.
‘Renuévate’ está cofinanciado por el Ministerio de Trabajo y
Asuntos Sociales (cerca del 60 por ciento) y por la Ciudad
(en el otro tanto restante). “Se apuesta por esto, porque la
educación es primordial. La educación hace libre al hombre”,
agregó Pérez, que, además, añadió su intención de ampliar el
horario educativo -por las tardes- para la próxima entrega
del programa.
Ana Alegre, técnica de integración, ha manejado, tanto la
organización, como la preparación de los alumnos. “Ha sido
un trabajo hecho desde el cariño, pero que ha costado mucha
dedicación”, explicó. Y lo repitió tras la primera actuación
de la tarde, el desfile de modelos de sombreros y antifaces.
La técnica destacó el espíritu fundamental de este proyecto:
“El tiempo que han pasada aquí -por los niños-, lo han
quitado de la calle”. Los chicos, que comprendían edades
entre los 5 y 14 años, hicieron una representación teatral
de guiñoles y otra de sombras chinescas. Por último,
cantaron temas nacionales e internacionales.
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