Los días se me pasan volando y no encuentro manera de que se
queden parados unos momentos para dejarme respirar con
tranquilidad las cosas de éste mundo. Lo digo porque cada
momento de la vida tiene su propia noticia y no daría abasto
para que uno sólo estuviera informando al respetable de
todos y cada uno de los eventos que ocurren, no ya en España
sino en el mundo entero. Por eso es bueno que nuestros
medios de información estén formados por equipos de
profesionales.
Lo que pasa con el PP, en referencia a su política de
desinformación hacia el ciudadano, con el único objetivo de
obtener votos que le aúpen a la presidencia del Gobierno y a
la mayoría absoluta en las Cámaras, ha tocado techo
técnicamente. Desmoronando las tesis mantenidas durante tres
y pico largos años. No es posible mantener esa postura que
el “malo” de Aznar pretende mantengan sus discípulos hasta
el fin de los tiempos.
No está bien de la cabeza quién pretende distorsionar un
veredicto, o darle otra forma de expresión, cuando se
insiste en una teoría que ya ha sido rebatida de manera
firme por la Justicia. Y no está bien de la cabeza cuando se
insiste de manera tan persistente como lo hacen, simplemente
porque lo hacen con el odio asomando en cada rincón de su
propio yo. Convertir o tratar de convertir ese odio en una
estúpida venganza sólo perjudica al conjunto de la nación,
por cuanto no la beneficia en nada y además de malgastar el
tiempo malgasta el potencial político del propio partido.
Cabe destacar que Rajoy ha atrapado rápidamente el freno del
descalabro político al no seguir la postura de Aznar en
referencia a esas palabras que se están haciendo famosas y
más que andan por los aires los intentos marroquíes de
desiertos y montañas. La tensión que lleva consigo Aznar
parecía haber pasado al resto de dirigentes peperos… hasta
que un juez, tipo Yul Brynner, dice que no hay indicios de
la existencia de lo que le quita el sueño a los peperos en
la autoría de los atentados del 11-M. El ridículo de esa
postura está garantizado. Así lo vieron y así lo
comprendieron los que tenían que verlo y comprenderlo y por
ello ahora pretenden echar tierra de por medio…
encontrándose con un vídeo emitido por los socialistas con
sus propias palabras y sus propios hechos que avalan la
hipocresía que reina entre ellos.
Cambiando de tercio, ya vemos que mis artículos de opinión
resultan poco menos que corazonadas u opiniones de
“pitoniso” y con el paso del tiempo los hechos que ocurren y
de los que saco conclusiones van camino de acercarse a mi
punto de vista. Lo que escribía entonces y lo que escribo
ahora coinciden con el tiempo con hechos y resultados
reales. Ya saben que aventuré, en un reciente artículo de
opinión, que la actuación del juez Garzón traería
consecuencias que afectarían a Ceuta directamente y ello
confiere que acerté, por cuanto la visita de los Reyes no
habrían tenido tanta alharaca ni tantos fuegos artificiales
si Garzón no hubiera abierto la espita de la bomba de
relojería mediática con su declaración de ser competente
para removerle las narices a los moros. La cosa ya está
alcanzando tanta envergadura que parece un toma y daca entre
naciones soberanas sobre sendos trozos de tierra. Pero da la
casualidad que esos sendos trozos de tierra corresponden a
tierras españolas sobre los que no puede haber ni un ápice
de negociación.
En fin, si dejamos tranquilo al moro tenemos más
tranquilidad, pero…
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