“Diez segundos, prevenidos. Tres, dos, uno... ¡Dentro!”. Así
empezaba ayer el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, una de
sus jornadas más mediáticas, que dio comienzo en ‘El
programa de Ana Rosa’, en Telecinco, y finalizó en ‘La tarde
con Cristina’, de la cadena COPE.
Compartiendo mesa con la presentadora Ana Rosa Quintana y
los periodistas Cristina López Schlichting, Margarita
Sáenz-Díez y Miguel Larrea, el responsable del Ejecutivo
local hizo balance de la visita de Sus Majestades los Reyes
a Ceuta, que “ha suministrado una altísima dosis de
confianza, ánimo y optimismo a los ceutíes”.
Los elogios a la actitud entusiasta de la ciudadanía, que en
su práctica totalidad nunca había vivido la visita de un
Jefe de Estado, dieron paso a cuestiones más controvertidas,
como las posiciones del reino alauita respecto a la visita
Real.
El presidente de la Ciudad aseguró que los ceutíes están
“tranquilos”, justificando con dos razones este sentimiento.
Por una parte considera que “las reacciones de Marruecos son
las de un país tercero, dado que Sus Majestades los Reyes
han cruzado el Estrecho pero no han salido del país”. Por
otra, aseguró que la posición de los poderes públicos
españoles es lo que confiere fortaleza a la ciudad, para
velar por el mantenimiento de la unidad nacional.
Haciendo gala del patriotismo que le caracteriza y del
orgullo ceutí, Vivas defendió la españolidad de Ceuta por
encima de todo, alegando que “es de naturaleza
consustancial, inequívoca y, en ningún caso, debe estar
sometida a negociación”.
El director de Publicaciones de Vocento, Miguel Larrea, puso
la nota discordante de la tertulia política, instando a una
cosoberanía de ambas ciudades autónomas con Marruecos. La
respuesta del Ejecutivo local no se hizo esperar,
espetándole que “eso sería como quebrar el Artículo 2 de la
Constitución Española [La Constitución se fundamenta en la
indisoluble unidad de la Nación española, patria común e
indivisible de todos los españoles]”.
En este sentido, Vivas indicó que, tan sólo especular sobre
esa posibilidad, “es causar un daño muy grande a Ceuta y
toda España”.
Recurriendo a la historia del país, el presidente recordó
que “Ceuta es España desde el mismo origen de esta, siendo
germen constitutivo” y aseguró que “los ceutíes no
concebimos otra bandera que no sea la española”.
A pesar de que las relaciones con Marruecos se han visto
resentidas tras la visita de los Monarcas, Vivas abogó por
mantener los lazos de unión con el Eeino alauita y defendió
la creación de una aduana comercial en la frontera del
Tarajal, que normalice los nexos comerciales.
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