Un amigo mío socialista, porque
tengo amigo de todas las ideas cosa que mucho no pueden
decir, me invita a tomar un café y en el transcurso del
mismo, mientras hablábamos de mil y una cosa de pronto, sin
esperarlo, me suelta la siguiente pregunta. ¿Por qué el PSOE
de Ceuta se encuentra en la situación qué se encuentra?. Y
por favor no te me vayas por los cerros de Ubeda, quiero
saber tu opinión real. O sea, como tú en muchas ocasiones
dice, las cosas claras.
No sé porqué, querido amigo, estaba esperando la pregunta,
lo que no esperaba es que fuese tan directa. La verdad es
que creo, con toda sinceridad, que mi opinión de poco te
puede valer. Por supuesto que será, sin duda alguna, una
opinión muy personal de alguien que nada tiene que ver en el
asunto. Tú que conoces, perfectamente, todos los entresijos
de tu partido sabrás mucho mejor que yo las causa que os han
llevado a esa desastrosa situación.
Nos conocemos hace muchos años, sabes el concepto que tengo
de tu persona y es, precisamente, por ese conocimiento y ese
concepto por lo que te solicito esa opinión. Sé que al
dármela lo harás de una forma objetiva y con toda la
sinceridad del mundo.
Está bien, querido amigo. Mi opinión personal sobre el
asunto es que al principio el PSOE de Ceuta, ingresó en sus
filas a personas que tenían de socialistas lo que yo, por un
suponer, tengo de esquimal. Esa amalgama que acudió, en los
días de gloria a inundar la calle Daoíz, no era más que un
grupo de personas, apuntándose la carro ganador y
preguntando, constantemente, “de lo mío qué”. A ellos se
unieron los que aprovecharon el momento para declararse
socialistas sin serlos y que más tarde llegaron incluso a
ocupar cargos de responsabilidad y cuando, más tarde, vieron
que no iban a conseguir los puestos deseados, se marcharon
del partido, inventándose unos nuevos para poder seguir en
el machito.
Lógicamente, querido amigo, afiliar a personas que nada
tiene que ver con las ideas del partido al final, llevan el
mismo al desastre. De ahí viene la cantidad de tránsfugas
que existen porque, al carece de ideas se venden sin dudarlo
un sólo instante al mejor postor. ¿Poderoso caballero es don
dinero!.
¿Tú crees, Andrés, qué esto lo podrá arreglar de la
Encina?.Mucho será el camino que tendrá que andar para
conseguir poner, al menos, un poco de orden y concierto.
Trabajo que hacer le queda, como se dice en Andalucía, una
jartá .
Pero esto que os está pasando a ustedes, también le puede
pasar a otros partidos, que están llevando a sus filas a
personas muy lejanas a sus ideas, dándoles, buenos puestos
de trabajo, ganando una pasta gansa en detrimento de todos
aquellos afiliados “de toda la vida” que se dan cuenta de
que ellos, los de verdad, no cuentan para nada.
Pero como nadie escarmienta por cabeza ajena, si te vale de
consuelo, ahí tienes el caso de los populares dándole buenos
puestos y buena pasta a personajes muy lejanos a sus ideas.
Craso error, ya lo decía la sabia de mí abuela “quien da pan
a perro ajeno, ni tiene pan ni tiene perro”
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