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L• La Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) no
generará “ningún tipo de malos olores”. Ni cerca ni lejos de
los terrenos de Santa Catalina donde comenzó a construirse
la primavera pasada. Así lo ha asegurado en declaraciones a
este periódico la ingeniera de Puertos, Caminos y Canales de
la Sociedad Estatal Aguas de la Cuenca del Guadalquivir (Acuavir),
Rocío Rodríguez, responsable de la obra, quien ha querido
disipar así definitivamente “y de una vez por todas” los
temores de los vecinos de Poblado San Antonio a que la nueva
infraestructura genere molestias en sus viviendas.
Según Rodríguez, con ocho años de experiencia, que se
incorporó a Acuavir para la puesta en marcha y desarrollo de
este proyecto, “todos los espacios donde se generan malos
olores en una depuradora están completamente desodorizados
en este proyecto: en primer lugar porque en su integridad
están cubiertos y en segundo lugar porque están sometidos a
diferentes reactivos químicos con aspersores de agua que
garantizan que, cuando su aire sale al exterior, no genera
ningún tipo de olor”.
“Yo he llegado a leer que al reactor biológico se le ha
llegado a denominar ‘piscina de residuos’”, recuerda la
ingeniera, quien reconoce que “si uno piensa que va a tener
al lado de su casa una ‘piscina de residuos’ con centenares
de metros de superficie es normal que le dé pánico”.
“¡Pero es que no tiene nada que ver con eso!”, corrige
Rodríguez, que además advierte de que “el agua residual da
olor cuando está estancada; cuando la haces pasar por un
recipiente y posteriormente no se limpia o cuando está a
cubierto”.^P^P^P^PPor eso, ejemplifica para tranquilidad de
los vecinos, las balsas de depuración del agua “generarían
malos olores o incluso serían peligrosas si estuvieran bajo
techo”.
El aire, la solución
Uno de los sistemas que se utilizan en las redes de
saneamiento para que no generen malos olores es inyectarle
aire”, amplía Rodríguez, quien advierte de que ninguna de
estas dos hipótesis se darán en la instalación ceutí, donde
descarta “totalmente” que aparezcan malos olores o gases
De acuerdo con las previsiones “técnicas” en las que se
mueve la responsable del proyecto “cuando la Estación
Depuradora empiece a funcionar si alguien se acerca a su
puerta de entrada no olerá a nada”. “Si se acerca aún más y
se coloca al lado de la balsa, no a setecientos metros de
distancia, olerá como cuando uno está en el campo y llueve:
a tierra mojada”, afirma.
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Una instalación con todas las novedades^P^P^P^Ptecnológicas
de última generación
La EDAR prevista pondrá fin al
problema de vertidos de aguas residuales que tiene la
ciudad, que, en la actualidad, vierte sus aguas al mar sin
ningún tipo de depuración. La construcción de la estación
cumple con la directiva europea 91/271/CEE sobre tratamiento
de aguas residuales urbanas y permitirá tratar las aguas
residuales y que estas puedan ser reutilizadas. La línea de
agua de la EDAR se compone de pretratamiento (desbaste y
desarenadodesengrasado), decantación primaria, tratamiento
biológico (fangos activos convencional en dos balsas de
5.800 metros cúbicos de volumen cada una), decantación
secundaria y tratamiento terciario (filtración en anillas y
desinfección con rayos ultravioleta con capacidad de tratar
5.000 m3/d). El tratamiento se complementa con un tanque de
tormentas dimensionado para un tiempo de retención de 30
minutos y un depósito de agua tratada de 2.000 metros
cúbicos. La línea de fangos está compuesta por dos
espesadores de gravedad de 13 m de diámetro, deshidratación
mediante centrífugas y dos digestores anaeróbios.
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medio ambiente
