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La onomástica de la Virgen del Pilar se saldó, en la
madrugada del sábado, con un escándalo protagonizado por
agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, en
pleno Poblado Marinero.
Al parecer y según han comunicado los responsables del local
en el que se produjeron los hechos, un grupo de agentes, que
se encontraba celebrando la festividad, se apropiaron de una
botella de champán Möet & Chandon de la barra. Ante el
requerimiento, por parte de los camareros, para que abonasen
el importe al que ascendía la bebida, los agentes aseguraron
haberlo hecho ya. Sin embargo, un testigo ocular de la
escena clarificó que los hechos no habían sido así, por lo
que el grupo tuvo que sufragar el gasto y fueron expulsados
del local.
Una vez en la calle, las doce personas esperaron a que
saliera al testigo, al que recibieron a puñetazos. La Unidad
de Intervención Rápida (UIR) de la Policía Local acudió al
lugar de los hechos para mediar, pero el grupo se reveló
espetando que “somos agentes de la autoridad”. Finalmente,
la disputa se saldó sin ningún detenido.
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