deportes - JUEVES, 11 DE OCTUBRE DE 2007

CEUTA
Manuel Montero
deportes@elpueblodeceuta.com

El hecho de que hayan transcurrido siete jornadas de liga y la AD Ceuta siga sin estrenar su casillero de victorias a domicilio es una cantinela que a Diego Quintero le está empezando a cansar. Por ello, después de haber jugado cuatro choques lejos del Alfonso Murube, el sevillano es tajante cuando se le recuerda el balance de los suyos como visitante: “vamos a terminar con este asunto”, replica.

El técnico caballa prefiere quedarse con que “ya van siete partidos de liga, estamos donde estamos, estamos donde nos merecemos y tampoco nos podemos quejar”. Mirando la tabla recuerda que “estamos en la tercera posición” lo que a día de hoy se traduce porque “estamos en puestos de cumplir objetivos”. A pesar de que para él “esto es una anécdota”, porque lo importante será estar ahí en la última jornada, “no me voy a comer la cabeza porque dejamos de ganar fuera, dejamos de perder o dejamos de empatar”. Según el que fuera mano derecha de Sergio Kresic, “mi obligación es hacer análisis de los partidos que hemos jugado fuera de casa, y en todos, salvo el día de Marbella, hemos estado más cerca de ganar que de empatar por méritos propios”. Una circunstancia que para él “debe ser una virtud”, en lugar de un defecto.

Una serie de razones que espera sean suficientes para olvidar el asunto porque “esto no debe obsesionar a nadie”. Y añade que “a nosotros no, y al entorno espero que tampoco”.

A estas alturas de campeonato “estamos viendo lo difícil que es sumar puntos fuera de casa”, y comenta como “algunos que presumiblemente tienen que estar arriba, les cuesta ganar en casa”.

Su mensaje es que “sin ser conformistas ni nada, siendo humildes y corrigiendo ciertas cosas, vamos a estar tranquilos y no obsesionarnos con esas hipotéticas victorias que no llegan fuera de casa”. Según aventura “ya llegarán, y llegarán algún día en cadena y me estareis comentando que estamos muy contentos y hay que trabajar la psicología”.

Para terminar asegura que “esto no nos pasaría si fueramos un conjunto ya sólido, que nos conociéramos en los pequeños detalles”. Y como ejemplo pone que “esto no ocurriría si fuéramos el Linares que tiene una base importante que llevan cuatro años juntos”, mientras que en el Ceuta “nosotros estamos formando todavía un equipo, con muchas cosas adelantadas, pero muchas cosas por conseguir”. A día de hoy “afortunadamente tenemos esa seguridad en casa y la vamos a seguir manteniendo”. Algo positivo porque “si no nos faltara nada, tendríamos un techo y el equipo tiene que avanzar muchas cosas”, termina diciendo.