Mientras siguen apareciendo
rastros del 11-M (sin obviar uno de primera importancia y no
muy conocido: el aviso de inminente peligro dado desde un
servicio de información en Ceuta y que, lamentablemente, no
parece se tuviera en cuenta), sigue sin haber luz sobre la
reciente neutralización en Argelia, el pasado 22 de
septiembre, de uno de los fundadores del GSPC integrado,
desde diciembre de 2006, en la nueva organización terrorista
‘Al Qaïda en el Magreb’ y que pudiera haber seguido los
pasos dados en junio por el “emir” de la “zona 9” (parte
occidental del Sáhara argelino), Abdelkader Ben Messaoud
(alias Mossab Abou Daoud), quien se habría entregado a las
autoridades argelinas. Rendido o arrestado en una barriada
periférica de Argel, se trata en todo caso de una buena
noticia en la lucha contra el terrorismo.
Pareja a la misma y en una exclusiva entrevista concedida,
el lunes 8, al diario francés “Liberation”, los responsables
galos de la DST, Bernard Sqarcini y de la RG, Joel Bouchité,
advierten del nuevo peligro representado por la remontada
salafista yihadista en el Magreb, poniendo Bouchité el dedo
en una de las razones de los éxitos en materia
antiterrorista del Hexágono: “El dispositivo francés
descansa sobre lo humano. Es indispensable estar al día
tecnológicamente pero nuestro capital, desde 1995, es haber
continuado en apostar sobre los recursos humanos”. Sqarcini
por su parte apunta a un sector emergente en el que anidaría
-como he recordado varias veces en esta columna- una
novedosa e impredecible fuente de peligro: el mundo de los
conversos al Islam… y sus descendientes. Las estadísticas
hablan por sí solas. En cuanto al reciente video de “Al
Qaïda” emitido el pasado 7 de septiembre, dos observaciones:
no parece haber duda sobre la veracidad de la imagen y la
voz de Ben Laden (aun no habiendo registros anteriores para
los nombres de “Sarkozy” y “Brown”), aunque los servicios
franceses plantean algunos interrogantes sobre el contenido
del discurso y la puesta en escena, “similar a la de hace
tres años”, detalle compartido por la CIA y el BND alemán si
bien, en esta ocasión, Ben Laden advertiría: “Estoy vivo y
sigo siempre en la yihad”. Verdad o no, la sombra de Osama
ha entrado ya, como la del “Che”, en los anales de la
historia.
Recalando para terminar en Ceuta, ciudad querida, permíteme
amable lector que exprese mis inquietudes sobre un conspicuo
personaje residente en la misma. Ah jai, chof, ¿estás ya
mejor de los nervios sidi Larbi Mateis?.
Aprovecha, Larbi, el final de este sagrado mes de Ramadán
para pedir perdón a toda esa gente a la que has engañado y
violentado, poniéndote en paz contigo mismo y con Allah/Dios.
De entrada podrías empezar dimitiendo de tu cargo de la
UCIDCE, pues los buenos musulmanes de esta Ciudad -que son
la inmensa mayoría- son ajenos tanto a ese peligroso
radicalismo que escondes como a tu conocida soberbia y
merecen ser representados por un líder honesto y solvente,
coherente con las costumbres y tradiciones de estas tierras
y ajeno, por tanto, a esas prácticas extremistas y extrañas
que te caracterizan.
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