La concentración de ayer tarde se planteó para exigir lo que
la mayoría de jóvenes españoles no tienen: Una vivienda
digna, de precio y condiciones de habitabilidad. Según
explicó el representante de Socioeconómicas del CJCE y
organizador, Óscar Pérez, se trató de “hacer un acto
divertido para pedir mejoras en el planteamiento de la
vivienda”. La petición, que se realizó a nivel nacional,
tuvo escasa respuesta en Ceuta a pesar de los anuncios
previos. Apenas una decena de personas participaron en un
encuentro cuyo objetivo era “no perder la actitud crítica en
ningún momento”, añadió.
La consejera de Juventud, Kissy Chandiramani, acudió a la
llamada de la presidenta del CJCE, Mariam Mohamed, y se sumó
a la concentración. Pero los miles de jóvenes ceutíes que
podían unirse al grito de guerra no reaccionaron.
Aunque no acudió tampoco, el Secretario general de
Juventudes Socialistas de Ceuta (JSCE), José Antonio
Carracao, manifestó, a través de un comunicado, dijo que “es
lógico y respetable que las jóvenes nos movilicemos para
exigir nuestros derechos (...), sobre todo en una ciudad
como Ceuta en la que hay escasez de suelo”. Aún así, fue
benevolente con el Gobierno de la Nación: “Hace los deberes
en materia de inversión para vivienda protegida y nuevas
ayudas, en cesión de suelo público, en la lucha contra la
especulación y en la promoción del alquiler”, dijo.
En este sentido, Pérez quiso contestar a Carracao diciendo
que el SPA (Servicio Público de Alquiler” “se anuncia como
lo máximo, pero no dejaremos de exigir”.
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