Los agentes de la Policía Local acudieron en la noche del
pasado miércoles a prestar servicio de colaboración con el
061 tras recibir una llamada que alertaba de un disparo en
un domicilio. Tras acudir a la zona, los agentes comprobaron
que no había presencia de armas de fuego por lo que
concluyeron que fue una falsa alarma.
En otro orden de actuaciones, la Policía Local intervino 30
kilogramos de pescado y 15 de fruta procedentes de la venta
ilegal. Esta cantidad fue destinada a un centro benéfico, al
contrario que otros 15 kilogramos de mejillones, que fueron
desechados.
Por otro lado, la Policía realizó una denuncia por
transportar pescado en un vehículo sin cumplir las
condiciones de acondicionamiento para la venta ambulante. A
esta se unen otras dos denuncias formuladas por los agentes
por tenencia y consumo de sustancias estupefacientes.
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