deportes - DOMINGO 30 DE SEPTIEMBRE DE 2007

CEUTA
Manuel Montero
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El Gimnasio Ceuta Goyu Ryu cayó con la cabeza alta ante un Fuengirola que hizo lo mínimo para llevarse los puntos del José Benoliel.

La clave del choque estuvo en la eficacia de cara a la puerta contraria de uno y otro conjunto, lo que llevó a las primeras de cambio a adelantarse a los visitantes al aprovechar un balón suelto a la salida de un córner.

A partir de ahí los amarillos jugaron con más intención aún de lo que habían hecho al comienzo del choque. A medida que iban transcurriendo los minutos las ocasiones se sucedían, y los ceutíes encerraban a los visitantes en su área. En el ecuador del primer periodo los de Manu León tuvieron una doble ocasión en las botas de Abad y Alfredo que el guardameta visitante abortó.

Pasaban los minutos y daba la sensación que el empate estaba cerca, pero entonces una agresión de Dani Alarcón a Maikel y un posterior pisotón de Hanas calentó el duelo. Un hecho que para lo único que sirvió fue para sacar a los ceutíes del choque que de ahí al descanso apenas hicieron nada.

En la reanudación los amarillos se rehicieron y fueron a por el empate. La clave para que llegara estuvo en la entrada de Hakim, quien llevó mucho peligro a la meta rival. Precisamente de sus botas salió el empate, al cruzar un balón y tras tocar en el palo alojarse en las mallas.

Cuando parecía que la remontada podía llegar sucedió todo lo contrario. En una jugada a balón parado Fali peinó un esférico sorprendiendo a Nono que se quedó a media salida. Cuatro minutos después, de nuevo Fali, culmió un contrataque desde la izquierda conducido por Cristian II que dejando el duelo sentenciado.

Ya en la prolongación Juan Antonio maquilló el marcador rematando un balón dentro del área fuengiroleña, pero no quedaba tiempo para más. El Goyu cayó con la cabeza alta.
 

El Benoliel asistió a un buen partido donde el Goyu puso el fútbol

A pesar de haber caído, los pupilos de Manu León se dejaron la piel sobre el Campo Federativo del José Benoliel.

El conjunto amarillo fue superior a los malagueños y en diferentes partes del duelo destilaron un fútbol vistoso que animó al respetable que se dio cita en la grada.

Cuando llegó el empate dio la sensación de que el triunfo terminaría cayendo del lado local, pero la falta de puntería de cara al marco contrario, y la fortuna de los fuengiroleños ante Nono evitaron que los puntos quedaran en casa.

Lo único negativo la falta de contundencia en la defensa para sacar los balones jugados, que en alguna acción pudo suponer que los gimnastas encajaran algún gol más en contra. Eso y el resultado, los únicos lunares a un buen partido de fútbol.