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Ante la presentación del proyecto de los Presupuestos
Generales del Estado para 2008, las reacciones del Partido
Popular no se han hecho esperar. A pesar de que la cuantía
presupuestada para la ciudad autónoma es de 81’8 millones de
euros para el próximo año, el capítulo de inversiones es
mucho menor. En palabras del senador popular por Ceuta,
Nicolás Fernández Cucurull, las inversiones vuelven a
descender por cuarto año consecutivo, caída que es superior
al 18 por ciento.
El proyecto de los Presupuestos Generales del Estado 2008 ya
es una realidad. Tras la presentación del informe, en el que
se recoge una partida presupuestaria de 81’8 millones de
euros para Ceuta, el senador del Partido Popular por la
ciudad autónoma, Nicolás Fernández Cucurull, ha reprochado
al Gobierno de la nación que haya negociado bilateralmente
las inversiones territoriales, “por evidentes razones
electoralistas”, con las comunidades de Cataluña y
Andalucía.
En la sesión de control al Gobierno del Pleno del Senado,
Cucurull espetó que el vicepresidente del Ejecutivo nacional
y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, “ha pasado
de ser el guardián de la ortodoxia al tragasables
presupuestario del Gobierno”, en la elaboración de los PGE
para 2008.
Así de rotundo se mostró el senador al preguntar si la
negociación bilateral que el Estado ha mantenido con
Andalucía y Cataluña para decidir las inversiones
territoriales en esas comunidades, se iban a extender al
resto de regiones y ciudades autónomas de España.
En unas palabras de Cucurull dirigidas a Solbes, el capítulo
de inversiones regionales de los PGE es un “verdadero
despropósito, como opinaba usted mismo hasta hace muy poco
tiempo al hablar de sudokus imposibles de resolver. Hasta
que lo ha solucionado por la insolidaria vía del
martillazo”. Según el senador popular, el método de
repartición se ha basado en: “Lo que me falta de un lado lo
quito de otro. Por eso, no se puede negociar con los
Gobiernos cuyos territorios se ven perjudicados”.
En opinión del PP, el verdadero problema de fondo es el
sistema de reparto de las inversiones por cuotas fijas,
“absolutamente insolidario”, ya que impide cualquier margen
para reducir las diferencias regionales.
Desde el Partido Popular también se ha hecho alusión a la
diferencia de criterios a la hora del reparto entre los
distintos territorios. “No pudiendo ser más de 100 el total,
se establece una diferenciación entre autonomías de primera,
que fijan su porcentaje en función del juicio que más les
convenga, y las de segunda, que se tienen que conformar con
lo que les dan y dar las gracias”, argumentó Cucurull.
En cuanto al proceso de reforma de la organización
territorial del Estado, impulsada por el Gobierno de la
nación, el senador del PP lo consideró “imprudente en el que
se ha llevado a cabo la liquidación de la solidaridad
interterritorial” e hizo especial hincapié en que “el Estado
está atado de pies y manos para decidir con criterio de
Estado dónde son más convenientes las inversiones en cada
momento”.
De este modo, el senador del PP ha resumido la cuestión en
“el sometimiento a la capacidad de presión y un indisimulado
electoralismo”.
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