En los casi treinta años que llevo
en Ceuta, he visto en el mundo del deporte personajes de
todos los pelajes, y precisamente los más válidos, los que,
de verdad, se han entregado por el deporte, no han sido los
que mejor han sido tratados.
Yo, hace un mes, pedía, en esa dedicatoria que hacía a Pedro
Moreno, recientemente fallecido, que era preciso que,
pronto, alguna instalación deportiva, no una cualquiera,
llevara su nombre.
Igualmente que reclamamos esto, tenemos que reclamar el que
un hombre, entregado desde hace muchos años al deporte,
especialmente con los jóvenes, tenga un sitio en alguna de
las instalaciones que hay en Ceuta, porque como hombre del
deporte ha hecho méritos suficientes para tener ahí un
puesto de trabajo, y muy especialmente cuando, a lo largo de
los años, estamos viendo que, ex deportistas ocupan un lugar
y, generalmente, cumpliendo con su misión muy bien, pero
también están colocados ahí algunos, no del deporte, y más
de uno de ellos, una vez asentados lo único que hacen es
dejar pasar el tiempo.
Por eso, el ICD, que tanto movimiento tiene estos días, bien
podría echar la vista hacia una persona como Ayora, que ha
demostrado cuando estuvo en alguna de esas instalaciones del
deporte que va a trabajar y cuidar de esas instalaciones, de
verdad, y como muy pocos lo hacen.
Hoy en Ceuta, y en cualquier parte del país, encontrar un
puesto de trabajo es complicado, pero creo que es más
complicado, aún, que quienes ocupan alguno de esos puestos
los desempeñen con dignidad y honradez, y en este sentido,
no me cabe la menor duda de que este hombre del deporte es
uno de los que puede, debe y tiene que estar en una de las
instalaciones deportivas de Ceuta.
Desde mi llegada a nuestra ciudad por segunda vez, hace ya
catorce años, he hablado en muchas ocasiones con Ayora, he
seguido sus pasos con los chavales de Balonmano, he visto el
interés que, años tras año, va demostrando por ser útil a
cualquier club que quiere promocionar el deporte y siempre,
especialmente cuando hay algún equipo de fuera en escena,
tratando de dejar el nombre de Ceuta en el lugar que le
corresponde.
Con él el gamberreo en las instalaciones o en los equipos no
tiene sitio. Con él el no atender al material deportivo o
las instalaciones no tiene lugar, y por ello insistimos en
que ya va siendo hora de que personas humildes, que no van
pidiendo nada, que no van faltando a nadie, que no son de
los que tiran de la levita, hasta lograr sus objetivos, digo
que, ya va siendo hora de que estos, también, tengan un
lugar al sol, convertido en un puesto de trabajo en algo que
conocen. Otra cosa no piden personas como Ayora, un joven
que lo único que busca es trabajar en algo que conoce y él
conoce y muy bien todo lo que rodea al deporte.
Sé que al llegar a este punto tendré división de opiniones,
cuando menos, pero lo que sé, también, es que quienes le
conocen estarán apoyando esta petición que estoy haciendo
hoy desde “el esquinazo”.
Y como “no se ganó Zamora en una hora” no creo que la
solución sea mañana, pero sí espero que sea cuanto antes,
con lo que el campo de fútbol que sea, o el polideportivo
tendrá en él al guardián útil y al mejor protector de sus
instalaciones, algo que en contadas ocasiones vemos que se
proteja de verdad, mientras que lo que se hace es abrir o
cerrar las puertas, sin más.
|