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Para ellos es suficiente recuperar la sonrisa de un niño.
Mohamed Abdeselam y Mohamed Chergui se embarcaron hace tres
años en una aventura que finalmente desembocó en la creación
de la ONG, ‘Enfermos sin fronteras’. El único objetivo de
esta asociación es ayudar a personas en situación de
precariedad económica y que padecen enfermedades graves o
crónicas. La peculiaridad es que estas personas viven en
Marruecos.
La casualidad les hizo conocerse. Abdeselam era policía
nacional pero una grave enfermedad lo retiró del servicio y
decidió dedicar su tiempo a personas necesitadas. Chergui ya
hacía lo que podía en su nave del Tarajal. No se avergüenzan
de pedir dinero. Abdeselam es conocido en el hospital de
Tetuán como el ceutí. Allí comenzó su andadura. Todos los
días cogía rumbo hacia la localidad marroquí cargado de
galletas y pañales para los pequeños y así comenzó a ganarse
el cariño de todos. Un día llegó a la tienda de Chergui a
comprar ropa de saldo para los enfermos y ahí comenzó la
historia.
Desde entonces han atendido cientos de casos y han
facilitado la vida a muchas personas. Aunque parezca
increíble la voluntad de estas personas ha llegado a
levantar una casa en Tetuán, en principio para huérfanos, y
ahora viven tres familias que ellos mismo mantienen. No
queda ahí la cosa. Sus donaciones son constantes. También
colaboran con la residencia de ancianos ‘Sidi Frg’, a la que
hace muy poco tiempo donaron 60 camas. Además insisten mucho
con los medicamentos, un bien escaso en el país vecino, que
increíblemente no facilita la labor de estas personas. El
último cargamento de antibióticos, facilitado por
‘Farmacéuticos sin fronteras’ y valorado en más de 9.000
euros, no pudo llegar a Marruecos debido a los problemas que
pusieron las autoridades y finalmente todo caducó en Ceuta.
Ayudar como vocación
“¿Cómo no voy a pedir dinero para esos niños? En Marruecos
solo les dan la cama, lo demás es muy caro y la mayoría de
las familias no pueden costear esos gastos”, afirma
Abdeselam. La ONG solo tiene 20 socios que ayudan cuando
pueden. “Son personas que nos dan algo, 5, 10 o 20 euros, lo
demás tiene que ser a base de pedir o de nuestro propio
bolsillo”, comenta Chergui.
Además ambos recuerdan que su aportación al sistema
sanitario es importante. El INGESA soporta constantemente
cientos de casos de ciudadanos marroquíes. Ellos recuerdan
que sus enfermos reciben atención en Marruecos ya que ese es
el objetivo, que puedan ser atendidos en su propio país.
“Quitamos un peso a la sanidad de Ceuta ya que compramos
medicamentos y todo lo que sea necesario en Marruecos, por
lo tanto esas personas ya no tienen que venir a Ceuta a
recibir cuidados”. También animan a la gente para que
colaboren más con la asociación. “Sabemos que la gente nos
conoce y nos trae muchos casos para que les ayudemos pero
también necesitamos que aporten algo, que nos ayuden”.
Y es que el gasto de esta ONG es constante. La media en
medicamentos, mensualmente, se eleva hasta los 300 euros.
Además normalmente sufragan el gasto de sillas de ruedas o
aparatos ortopédicos que en Marruecos alcanzan precios que
oscilan entre los 600 y 1.000 euros.
Colaboración
No perdieron la oportunidad de agradecer la atención que el
director territorial del INGESA, Jesús Lopera, ha mostrado
siempre con la asociación. “Estamos muy agradecidos porque
es una de las personas que más se ha volcado con nosotros”.
Y vuelven a realizar un llamamiento a toda la ciudadanía de
Ceuta para que la gente los ayude. “Hemos atendido cientos
de casos en estos últimos años pero necesitamos la ayuda de
todos, no nos basta con que la gente venga a nosotros para
solicitar ayuda, también necesitamos que pongan de su parte.
Si alguien está interesado en colaborar con la ONG,
‘Enfermos sin fronteras’, los podrán encontrar en la avenida
Reyes Católicos 23 (tienda Chergui Hogar) y su número de
cuenta es el 2100-420721-2200021290. Seguro que ellos, y sus
pacientes, se lo agradecerán.
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A la espera de recibir ayudas, tanto de la Ciudad como de la
Delegación
‘Enfermos sin fronteras’ ya suena
por los pasillos de la Asamblea. Hace poco que se reunieron
con el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Vivas.
“Salimos muy satisfechos de la reunión porque se comprometió
a ayudarnos y a meter a la asociación en el presupuestos,
pero de momento aún no sabemos nada”.
También reclaman ayuda a la Delegación del Gobierno.
“Creemos que nuestra labor es importante y por eso pensamos
que merecemos ayudas públicas”, Hay que tener en cuenta que
en estos momentos todo los gatos generados por la ONG están
sufragados por ellos mismos. “O lo ponemos de nuestro
bolsillo o lo pedimos, es la única forma que tenemos de
poder comprar medicamentos, ropa y comida para los que lo
necesitan”.
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reportaje
