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La supuesta agresión y amenazas a este agente sucedió el
pasado 4 de septiembre, sobre las 21:30 horas, en la calle
Argentina. La mujer fue denunciada por su ex-pareja tras
recibir numerosos daños físicos y amenazas. Durante la
vista, el agente insistió en que teme por su vida y por el
hecho de que su ex-pareja cumpla la amenaza de muerte que le
hizo.
El Juzgado de lo Penal Número Uno de Ceuta sentó ayer en el
banquillo de los acusados a H.E.H, una joven de Tánger,
ex-pareja de un agente de la Guardia Civil destinado a
Ceuta, por un delito de malos tratos y falta de vejaciones.
Los hechos denunciados sucedieron el pasado 4 de septiembre,
sobre las 21:30 horas, en la calle Argentina. El hombre se
encontraba paseando a su perro, cuando, según relató ante el
Tribunal, “me encontré con mi ex-pareja y ella muy borracha
y nerviosa comenzó a insultarme y a agarrarme de la camiseta
diciéndome que tenía que hablar conmigo”.
Al parecer, la mujer se puso agresiva y comenzó a arañar a
la supuesta víctima, “incluso me llegó a dar un mordisco en
el brazo derecho”, matizó el agente afectado.
El Tribunal insistió en conocer si las lesiones que
presentaba la joven se las había provocado el agente durante
el forcejeo de la disputa, pero no pudieron quedar
acreditadas. La mujer insistió en que “me cogió del cuello y
me pegó una bofetada en la cara”.
La pareja había vivido junta durante seis meses, pero la
relación se había acabado hacía varios meses, según explicó
el afectado. “Desde entonces he recibido varias amenazas y a
día de hoy, temo por mi vida realmente”, indicó. Al parecer,
la chica le ha dicho en varias ocasiones que va a mandar a
varios musulmanes a que le corten el cuello. El Fiscal
solicita una pena de 6 meses de prisión. El juicio quedó
visto para sentencia.
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sentencia 
