La AD Ceuta encajó en la mañana de ayer ante el Betis B su
primera derrota de la campaña en un choque que se decantó
del lado verdiblanco por un error defensivo mediada la
primera parte que significó el 1-0. Además del gol en
contra, los ceutíes se encontraron con el lastre de las
expulsiones de Juanfran y Sandro, que les condenaron a salir
de vacío de la Ciudad Deportiva Manuel Ruiz de Lopera.
Durante la semana se estuvo especulando en el vestuario del
Murube con un cambio de sistema, pero Diego Quintero apostó
finalmente por el rombo en el centro del campo dando
continuidad al planteamiento que había utilizado en las tres
jornadas anteriores. Una decisión que no le salió bien al
técnico ya que los béticos se hicieron dueños de la parcela
ancha y del balón. Circunstancia esta que tampoco sería
definitiva, sobre todo en los compases iniciales, porque el
único peligro que generaba el Betis era desde banda con
balones que no encontraban rematador. Y es que si los
sevillanos ponían el fútbol los ceutíes creaban las
ocasiones gracias a su fútbol directo. De hecho la primera
ocasión estuvo en las botas de Enzo, pero el disparo del
argentino acabó mansamente en las manos de Casto. El
siguiente en probar fortuna fue Fran Amado al chutar desde
la frontal y obligar a al guardameta a enviar a córner. El
algecireño, que en la primera mitad fue el hombre más
desequilibrante de los suyos, forzó poco después una falta
en la frontal que Enzo estrelló en la cruceta.
Las ocasiones caían del lado visitante pero los béticos,
lejos de descomponerse, seguían a lo suyo rondando la puerta
caballa con paciencia y esperando su opción. Una ocasión que
no tardaría en producirse y que a la postre se convertiría
en la clave del partido. Ésta llegó merced a un balón
colgado desde la derecha sobre el área ceutí sin aparente
peligro que Lledó no acertó a blocar y que, ante la falta de
entendimiento de la defensa, Carreño empaló para adelantar a
los de Heliópolis. El tanto encajado por los blancos –ayer
de negro- fue un jarro de agua fría para los caballas que
tardaron en reaccionar, mientras los béticos, ahora a la
contra, buscaban la espalda de la defensa para poner más
distancia de por medio. De esa manera Carreño volvió a tener
una nueva opción, pero Sandro la abortó mandando a córner.
Antes del intermedio se pudo volver a mover el marcador para
cualquiera lado. El Ceuta, que se fue arriba en busca de la
igualada, y los béticos, aprovechando que el rival
adelantaba sus líneas, quemaron sus cartuchos. Así los
caballas tuvieron su ocasión más clara cuando, a falta de
cinco minutos para el descanso, un pase desde la derecha de
Enzo llegó a Fran Amado para, libre de marca y ante el
portero, no conectar con el esférico. La réplica llegó en
las botas del bético Diego al plantarse solo ante Lledó tras
una rápida carrera, pero su remate flojo y centrado, murió
en el arquero. Un minuto después, de nuevo un contraataque
del Betis fue culminado por Rodri que lanzó cerca de la
escuadra izquierda de la meta.
En los tres minutos de descuento que concedió el trencilla
aún pudo variar el resultado. Primero la tuvieron los
ceutíes, pero no hubo nadie que acertara a rematar un pase
atrás desde la derecha. Después los béticos, con velocidad,
crearon un dos contra uno, pero en el último momento Sandro
desbarató el peligro.
A pesar del esfuerzo acumulado y del calor reinante la
segunda mitad parecía que iba a seguir por los mismos
derroteros con que habían terminado los primeros
cuarentaicinco minutos. Sobre todo porque al poco de
arrancar ya se había contabilizado una ocasión por cada
bando. Pero la historia cambió cuando los visitantes se
quedaron con diez por una expulsión absurda de Juanfran, al
entender el colegiado que había agredido a un contrario. Una
inferioridad numérica que el Ceuta acusó durante un periodo
de tiempo en que el filial bético se dedicó a dormir la
contienda y a dejar que corriera el reloj.
De esta forma hubo que esperar hasta el 70´ para que Javi
Navarro, que se intentó echar al equipo a las espaldas como
antaño, mandara desviado por poco un cabezazo. Acto seguido,
de nuevo Javi Navarro, puso un balón a Tato que el murciano
remató arriba.
A partir de ahí el partido se animó y los ceutíes buscaron
el empate. Por su parte el Betis, viendo que podía llegar la
igualada, buscó el tanto de la tranquilidad. Así los
béticos, mandando balones en largo, pudieron sentenciar por
mediación de Diego. Pero su inocente disparo fue a parar a
Lledó. El choque entró en una fase de nervios e
imprecisiones que terminó en un correcalles. Una situación
que acabaría a falta de seis minutos para el final cuando el
Ceuta se quedó con nueve al ver Sandro la roja directa por
agarrar de la camiseta a Carreño cuando corría hacia la
portería caballa.
Con dos hombres menos sobre el tapete los ceutíes tiraron la
toalla al darse cuenta que el partido estaba visto para
sentencia. Ya en tiempo añadido Israel puso el 2-0
definitivo asegurándose los tres puntos. Un Israel que, dos
minutos después, fue expulsado por doble amarilla. Pero no
quedaba tiempo ni fuerzas para más. El Ceuta se marchó de
Sevilla de vacío, exhausto, y con las bajas de Juanfran y
Sandro para la próxima visita a Baza.
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