Gimnasio Goyu-Ryu B y Séneca B estrenaron en el mediodía de
ayer su casillero de puntos en su segundo encuentro en Liga
Nacional de la temporada 2007/2008. Ceutíes y cordobeses
firmaron sobre el césped artificial del Martínez Pirri un
partido aburrido, sin juego ni oportunidades, y en el que la
garra y el empuje ganaron la partida al talento y al toque
para desgracia del público asistente.
En el debut de los amarillos como locales, los andaluces
fueron superiores, llegando más y con mayor peligro a las
inmediaciones de la portería defendida por Kevin.
Sin embargo, y tras adelantarse merced a un gol de Faillo a
falta de tan sólo dos minutos para el pitido final, un
discutidísimo penalti en el tiempo de descuento del meta
Dani sobre el ceutí Reyes, transformado magníficamente por
Oncina, puso el definitivo empate a uno en el marcador para
desesperación y enfado de los jugadores y técnicos
rojinegros.
Con este resultado, tanto caballas como andaluces
continuarán, a falta de conocer el resto de resultados de la
jornada, en la parte baja de la clasificación del grupo ‘XIV’.
Una zona de peligro que, previsiblemente, ambos filiales
compartirán a lo largo de la campaña, convirtiéndose en
rivales directos para eludir el descenso de categoría.
La primera mitad del partido del Pirri comenzó con ambos
equipos tanteándose y buscando su puntos flacos. La primera
ocasión llegó en el minuto 13, cuando Andrés remató fuera
una contra muy bien trenzada por el la banda derecha del
ataque cordobés. La respuesta amarilla corrió a cargo de
Antonio pocos minutos después. En la mejor ocasión del
partido para los caballas, el defensor aprovechó un balón
muerto en el área tras un córner para conectar un remate que
se marchó directamente a los brazos del portero rojinegro.
En los albores de la primera parte llegó una gran
oportunidad para los visitantes, al estrellar Quirós su
disparo cruzado en el poste derecho de la portería de Kevin.
En la reanudación, el empuje rojinegro se materializó en un
nuevo balón al larguero. Raillo, muy pillo, aprovechó
mediada la segunda mitad un despiste del zaguero local para
robarle el esférico y poner un balón atrás que García remató
al larguero. Los locales, por su parte, no encontraban el
camino y sus ataques acababan una y otra vez en jugadas sin
peligro. Así, el choque alcanzó su recta final con el cuadro
andaluz presionando para sumar su primer triunfo.
Y este casi llega. Sobre todo después del gol de Faillo en
el 88’, al aprovechar una salida en falso de Kevin en un
falta lejana. Sin embargo, el penalti decretado por Reggen
Rodríguez dos minutos después, tranformado por Oncina, puso
las tablas en el marcador para alegría de unos y enfado de
otros.
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