Las trombas de agua son debidas a las trompas que padece
Poseidón (Hijo de Cronos y Rea. Dios del mar. Es uno de los
más importantes dioses Olímpicos. Casado con Anfititre.
Vivía en un palacio marino. Como otras deidades marinas
tenia el poder de metamorfearse. Entre su numerosa prole
encontramos monstruos, hombres y héroes. Se le representa
desnudo, subido en un carro al que acompaña un pez y
llevando un tridente) cada vez que se encuentra con su
compadre, el incestuoso Océano (Hijo de Gea y Urano,
primogénito de los Titanes. Representa el agua que rodea al
mundo. Padre de todos los ríos, con su hermana Tetis
engendró a las Oceánides, personificaciones de arroyos,
fuentes, etc. Es una de las fuerzas primitivas). Ambos dos,
cuando terminan las juergas en el bar de Melopea, servidos
por Dionisos (Hijo de Zeus y Sémele. Dios del vino .Durante
su niñez, fue implacablemente perseguido por la celosa Hera.
Siendo adolescente, descubrió la forma de hacer vino con el
fruto de la viña. Ya adulto, se instaló en el Olimpo
Sentándose el lugar que le cediera Hestia. Fue el esposo de
Ariadna, después de que Teseo la abandonara), padecen
tremendas resacas que barren todo cuanto encuentran más allá
de las orillas y suelen aplacarse pasados unos días.
Suele ocurrir que el minúsculo y esmirriado ser humano se
encuentre totalmente desamparado ante la furia que los
vaivenes que esos dos titanes ebrios desatan y a los que
suelen denominar inclemencias. Lógico, no suele existir
clemencia cuando se comportan así.
Una de las consecuencias directas, las colaterales las
producen, normalmente, las autoridades responsables de la
protección ciudadana, es que el ser humano se ve totalmente
indefenso cuando se ataca a su morada habitual, léase
vivienda, y sólo tiene las posibilidades de limpiarla o
comprarse otra. Depende de la virulencia con que sea
atacada.
Otra especie de tromba, perjudicial para el ser humano, es
la que viene producida por la trompa de los números
especulativos de rápido beneficio económico: las hipotecas.
Ahí entran en escena el también incestuoso dios Cronos (Hijo
de Urano y Gea. Personificación del tiempo. sorprendió a su
padre mientras dormía y le cortó los testículos, instigado
por Gea. Se casó con su hermana Rea. Como sus padres le
habían predicho que seria destronado por uno de sus hijos,
se los tragaba a medida de que Rea los iba concibiendo.
Finalmente Zeus le destronó, igual él hiciera con su padre
Urano), que con su dominio del tiempo y su voracidad, acaba
con las esperanzas de los humanos, antes de que abrieran la
caja de Pandora.
No se por qué los ciudadanos que no son jóvenes no tienen
opción a una vivienda digna, al menos en las campañas de
nuestros políticos dirigentes no los mencionan, cuando en la
mayoría de los casos están tanto o más necesitados de ella.
Las campañas, que se efectúan para favorecer el acceso a la
vivienda de nuestros jóvenes, tienen un punto claro de
discriminación respecto a los de mediana edad y a los
mayores.
Muchos ciudadanos, que ya no son jóvenes, carecen de
recursos para acceder a una vivienda digna y no digamos de
aquellos que, estando divorciados, han visto como sus
viviendas –sobre las que han pagado trabajando toda la vida-
pasan a otras manos y se ven casi obligados a dormir bajo
los puentes, metafóricamente escrito.
Conseguir una hipoteca, los que no son jóvenes, para
adquirir una vivienda de 360.607 euros (60 millones de las
antiguas pesetas) conlleva el riesgo de entrar en las fauces
de Cronos y tratar de estar pagándola el resto de su vida…
¿quién lo aguantaría? Las noticias no son nada halagüeñas,
en los Estados Unidos ya tienen el “crack” de los morosos
hipotecarios por las nubes y sólo es cuestión de Cronos para
que aquí ocurra lo mismo, pese al optimismo de nuestro
Gobierno acerca de la salud económica del país.
Cambiando de tercio, me asombra enormemente la poca
inteligencia que tienen algunos que yo consideraba amigos.
Se da el caso de que han salido con tan mala leche por no se
qué causas, según entienden esos supuestos amigos, les han
ofendido. Esto pasa por ser uno tan confiado en eso de la
amistad a ciegas, que no amor a ciegas ¡eh! eso se lo dejo a
ellos, y salen con lo contrario de lo que uno quiso y quiere
expresar en su opinión personal y cotidiana.
Debo reiterar y reitero, parafraseando al ex presidente
Suárez, que nunca he tenido intención de ofender
personalmente a nadie, ni mucho menos cuando ese nadie
autoriza a que publique su nombre, aunque luego manifieste
lo contrario, y permita hacerse fotos que, sabiéndolo muy
bien, saldrían publicadas. Esa increíble actitud sólo puede
entenderse cuando se siente picado por las supuestas
verdades que pueden traslucir mis opiniones. Un malentendido
que se traduce en que yo nunca estoy sólo, ni aquí ni en
Pekín. En que a mí me importa un pito sus vidas y sus
problemas. En que yo no soy un profeta, de religión alguna,
que pueda obrar milagros y encima poniendo cara de hipócrita
rezumado. Únicamente, debo reiterar y reitero, que expreso
mi opinión personal e intransferible sobre la que nunca he
pedido a nadie que comulgue con ella. ¿Está claro?, soy así.
Expreso mis opiniones según las configuran mi cerebro y si
alguien se siente aludido, ese es únicamente su problema. No
mío. Con ello quiero decir que he acertado en tal o cual
opinión y, sabido es, algunas verdades duelen a quienes se
sienten aludidos. A otros le duelen simplemente por rabia o
por odio contra quienes defiende ideales opuestos a los
suyos, éstos son los antidemócratas y antisociales. Los
nostálgicos de un régimen que, quiera Quién Sea, nunca debe
volver.
Hacéis sonar vuestras trompetas y vuestros tambores, yo hago
sonar mi humilde pito y mi humilde pandero. Esto es
democracia. Si sólo permitís que suenen vuestras trompetas y
vuestros tambores, eso es dictadura.
A vuestra entera disposición.
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