“Me gustó lo que leí ayer en la prensa sobre que la Ciudad y
el Puerto habían acordado decir solemnemente que lo ocurrido
era una barbaridad, que no podía volver a ocurrir y que se
tomarían las medidas pertinentes”, comentó ayer el delegado
del Gobierno, Jenaro García-Arreciado respecto al incidente
entre agentes de la Unidad de Intervención Rápida (U.I.R.)
de la Policía Local y la Portuaria. El representante estatal
coincide en la postura que han adquirido tanto la Ciudad
como la Autoridad Portuaria. Considera que es un suceso que
no se debería producir, que no se puede repetir, pero “un
suceso que tiene solución”.
Arreciado postula que existe una competencia compartida en
la zona ya que argumenta que la Policía Local tiene el
derecho a utilizar la coacción como Fuerza de Seguridad del
Estado mientras que la Policía Portuaria se encarga de la
ordenación y control del tráfico.
La responsabilidad recae, en opinión del delegado del
Gobierno, en los máximos representantes de estas
instituciones a la hora de coordinar el trabajo, es decir,
de establecer las condiciones y circunstancias que requieren
la colaboración de ambos colectivos.
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