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El sacerdote hindú Juan Carlos Ramchandani celebró ayer
noche, con 40 amigos, el nacimiento del señor Krishna, en la
intimidad de su centro de yoga. Una ceremonia llena de color
para conmemorar la llegada al mundo, hace 5.000 años, en el
pueblo indio de Mathura, de una de las deidades más
importantes del colectivo. En la distancia, los 400
integrantes de la comunidad en la ciudad autónoma
festejaron, en la más estricta intimidad, la historia del
célebre dios. El año que viene será diferente. La
culminación del primer templo hindú de Ceuta permitirá
festejar, a partir de mediados de octubre, las celebraciones
más significativas en el inmueble religioso.
Sri Krishna Janmashtami es, junto a Diwali (Fiesta de las
Luces) y Navaratri (Diosa Durga), la festividad más
importante de la India y a diferencia de otros eventos que
son seguidos de forma más minoritaria, tiene una gran
acogida entre la comunidad porque suele ser el día del año
en que más gente visita los templos. Los devotos ayunan
hasta las doce de la noche para después realizar una
ceremonia de lo más auspiciosa, justo cuando Krishna nace.
Suele celebrarse el octavo día de cuarto menguante del mes
de bhadra (agosto/septiembre), por lo que no siempre cae en
la misma fecha. Los templos son decorados de forma muy
opulenta y se visten las deidades con ropas nuevas. Se hace
una ceremonia publica de abhiseka en que los dioses son
bañados con cinco sustancias auspiciosas conocidas como
panchamrita (leche, yoghurt, miel, agua azucarada y ghi). En
el caso local, a punto de inaugurarse el primer templo
hindú, se pospondrá la ornamentación del edificio hasta la
celebración de 2008. El edificio contendrá representaciones
de deidades como Sita-Rama-Lakshman-Hanuman, Shiva-Parvati,
Durga Mata, Ganesh, Jhulelal y también de Radha Krishna.
Piezas ornamentales que Ramchandani trajo expresamente de la
India.
Tal como explicó el sacerdote, es una festividad que se
celebra por todo el país especialmente en los templos
consagrados a Krishna en Gujarat, Rajasthan, Mathura y
particularmente en Vrindavana donde la fiesta es muy
elaborada. A las doce de la noche se ofrece a las deidades
un gran arati.
En la reunión que mantuvo Ramchandani en su centro de yoga,
celebró una ceremonia de fuego (hawan), un baño ritual (abhishek)
y una ceremonia de adoración (arati) para, al final,
distribuir alimentos bendecidos (prashadam) entre todos los
asistentes a la ceremonia.
Mientras, a miles de kilómetros de aquí, millares de
personas participaron ayer en el festival de Janmashtami,
con juegos, presentaciones teatrales y procesiones,
festejaron que el señor Krishna había cumplido 5.000 años.
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CELEBRACIÓN / reportaje 
